Furia de titanes

Crítica de Mauricio Svetaz - RosarioCine

Titanes en su salsa.

Nueva versión del clásico de aventuras de la década del ’80.
Nos cuenta casi fielmente la leyenda de Perseo (interpretado por Sam Worthington), hijo del Dios Zeus (No, de Poseidón como se mostró en “Percy Jackson…”) con una humana, lo que lo convierte en un semidiós.
Pero Perseo, ignora esto, ya que fue rescatado del mar por un humilde pescador, que junto a su esposa lo adoptan como suyo y se convierten en su familia terrenal.
Mientras tanto, el pueblo de Argos, está descontento con los dioses, por la falta de lluvias, alimentos, etc. por lo que deciden, destruir la gran estatua de Zeus que se encuentra emplaza en su ciudad.
Esto hace enojar, mucho a Zeus (Liam Neeson), que convencido por su maléfico hermano Hades(Ralph Fiennes) , decide castigar al pueblo de Argos, dándole 10 días para que sacrifiquen a su princesa Andrómeda, o mandará al “Kraken” (gigantesco monstruo marino mitológico) a que destruya la población.
Por lo que Perseo, junto con otros valientes guerreros irán en busca de Medusa, una malvada mujer-serpiente, que petrifica a cualquier ser viviente con solo mirarlo, con el objetivo de cortarle la cabeza y usarla para transformar al temido monstruo en piedra.
El viaje será largo e incluirá lucha contra gigantescos escorpiones, una extraña alianza con los “genios”, y una tétrica visita a las “brujas”.
Todo por salvar a su princesa Andrómeda, y no sacrificar una sola vida en lugar de todo un pueblo, lo que no le gustará nada a los habitantes de Argos, lo que le dará aun menos tiempo a nuestro héroe para realizar su hazaña.
Se destacan los efectos especiales, principalmente a la hora de crear los monstruos (Escorpiones, Kraken, etc.) y buenas interpretaciones, como la de Hades de Liam Neeson.
Una buena opción para ver una buena película de acción/aventuras, con buenos efectos y que respeta la historia de la verdadera leyenda griega
Nota: la versión en “3D” solo esta “pasada” a ese formato, por lo que no vale la pena gastar de más en verla en “3D” se disfruta igual en 2D y se ahorran unos mangos.