Fragmentado

Crítica de Leonardo Perez - Función Agotada

_ But I found you. So many sacrifices, just to find you.

M. Night Shyamalan (n. en Puducherry, India, 1970) ganó fama internacional después de escribir y dirigir Sexto Sentido (The Sixth Sense, 1999), película que fue éxito comercial y nominada a seis estatuillas Oscar. En aquel entonces Hollywood creyó haber encontrado a su nuevo profeta. Sin embargo, tres años más tarde llegaría El Protegido (Unbreakable, 2002) y nada volvería a ser lo mismo. Es paradójico que siendo un director que intenta romper el molde, repita tantas veces las mismas ideas. En general, sus películas tienen un giro inesperado o un final sorprendente, tienden a tener temáticas religiosas, sus personajes son individuos ordinarios atrapados en circunstancias extraordinarias, “etcétera”. Motivos por los cuales fue perdiendo prestigio y protagonismo a través de los años. No es casualidad que Blumhouse Productions (Actividad Paranormal, 2009), compañía dedicada a explotar el cine terror, clase B, haya producido conjunto a Shyamalan, Fragmentado o Slipt si se quiere, en su idioma original.

Lo primero que voy a decir es que me gustó, y mucho. Tiene puntos muy altos, aunque tal vez le sobren 10 minutos. Este thriller psicológico hace buen uso (y no abuso) de los primeros planos, los cuales generan (junto a una monotemática ambientación) sentimientos de opresión y angustia, que por consecuencia dan paso a escalofriantes y terroríficos momentos. Otro gran acierto es el tiempo que se toma en desarrollar a sus personajes, en especial a Kevin Wendell Crumb (James McAvoy) o bien a Casey Cooke (Anya Taylor-Joy). Supongo que fue una decisión difícil, Kevin cuenta con 23 personalidades! Imposible imaginar a todas en acción, por lo que centrarse en cinco o seis fue lo más acertado. A medida que se desarrolla la trama, este mundo despiadado toma entidad y deja en claro que solo los más fuertes sobrevivirán. Si se quiere hilar fino, la imagen final de la estatua del león sobre su presa es mucho más profunda de lo que parece, como la película en sí.

James McAvoy deslumbra con una versatilidad actoral pocas veces vista.
Como dato interesante el presupuesto es ínfimo en comparación a sus otras producciones (The Last Airbender, 150 millones USD).

McAvoy deslumbra con una versatilidad actoral pocas veces vista. Increíble el trabajo corporal que realizó al ir mutando de personalidad. Por el lado de Taylor-Joy, su carrera, como protagonista del cine terror, está en plena consolidación. Su papel de misteriosa adolescente que esconde un pasado horrible esta personificado de forma sublime. Betty Buckley como la Dra. Karen Fletcher tiene momentos muy buenos. Hasta el mismísimo Shyamalan cuenta con un cameo.

En resumen, la conjunción de clichés o refritos utilizados no aburren en lo más mínimo y la famosa vuelta de tuerca o latiguillo re significa la perspectiva final, de manera tal, que nos es imposible no volver al’ 99 y pensar en “pucha, estaba muerto!”.

Moraleja, no todo los cliché son una bosta… Gracias Shyamalan!