Foto Estudio Luisita

Crítica de Caty Filgueira - Cuatro Bastardos

Foto Estudio Luisita: La retratista de la farandula argentina.
El estudio fotográfico Luisita uno de los históricos de Buenos Aires en sus años de gloria vio pasar por sus puertas incontables estrellas de la farándula argentina…
El teatro de revista vivió su época dorada hace ya mucho tiempo. Pero en lo que alguna vez fue el Foto Estudio Luisita, los recuerdos de esa época perduran con una claridad que impone y con unas imágenes únicas.
El estudio de la fotógrafa Luisita Escarria, oriunda de Bogotá, es uno de los más emblemáticos de Buenos Aires. En él se fotografiaron famosos desde la década de los 60 a la de los 80 que incluyeron nombres como Moria Casan, Susana Giménez y Amelita Vargas entre muchos otros. En su departamento de la calle Corrientes aún viven ella junto a sus hermanas Graciela y Rosa Escarria, además de sus mascotas, quienes saben robar cámara como pocos.
Los directores, Sol Miraglia y Hugo Manso, interactúan con las tres hermanas solteras que protagonizan este documental, donde hacemos un recorrido en profundidad por la vida y los recuerdos de quien pudo ver de cerca, y con un ojo crítico inimitable, a algunos de los grandes nombres de la farándula local.
En este anecdótico lugar, Luisita era la fotógrafa que muchos decían tenía un ojo particular y que lograba fotos antes no vistas de sus modelos; sacándolos de la necesidad de posar y lograr que se relajen. En su objetivo, la asistía Chela, quien era la iluminadora y la ayudaba con la post-producción.
Al principio del film, vemos tanto a Luisita como a Sol recorrer el hogar de la fotógrafa y recuperar, una a una, cajas y cajas de fotos que son un tesoro de archivo. Incluso, en un momento, se separan algunas de las fotos más emblemáticas que se llevaron a cabo allí y, solo esas pocas, ocupan una sala entera.
En una nostálgica recolección de los hechos, Luisita, Chela y Rosa nos cuentan lo que fueron esos años locos donde veían el mundo pasar a través de la lente de una cámara. Desde anécdotas, que van de su llegada a Buenos Aires a la primera foto tomada por Luisita, a momentos un tanto amargos (como la vez que, al ser premiada, unos fotógrafos se negaron a tomar su foto), la vida que este estudio congeló en algunas imágenes es impresionante.
El documental no solo nos cuenta la historia que pasó, sino la que se llevó a cabo mientras se filmaba. Esta parte nos muestra como se puso en marcha y se llevó a cabo una muestra en el Centro Cultural San Martín sobre la obra fotográfica de la artista. Y su reencuentro con algunas de las estrellas que ella fotografió en los inicios de sus carreras.
Uno de los elementos más memorables de como se compaginó este film es la inclusión de la obra de Luisita. Particularmente, a como se buscó resaltar sus fotos de forma tal que tuvieran el lugar que se merecen en esta historia pero sin robar el foco de la misma.
En Foto Estudio Luisita, la historia manda: desde como su madre puso un estudio fotográfico luego del fallecimiento de su marido a la primer foto que Luisita misma contó que le dio vergüenza tomar y al primer llamado que las hermanas recibieron de parte del Maipo para fotografiar a algunas de sus estrellas.
A través de fotos, relatos y testimonios varios podemos hacernos una clara idea de la generación que este estudio retrató. Y las técnicas que se usaban entonces, porque si hay algo de lo que estas hermanas están orgullosas, es de los trabajos que lograron. Y ver de primera mano como lo hicieron es algo que nos lleva a apreciar aún más los talentos de la era analógica: superposiciones, ediciones y más cosas que se hacían a mano y con una paciencia y cariño que poco se ven hoy en día.
Y como declaran las hermanas mismas, el avance de la tecnología fue en buena parte los que las sacó del negocio de la fotografía al final. Pero lo que lograron generó un archivo que probablemente no tenga igual y que nos muestra imágenes de una época que muchos quizá olvidaron.