Florence

Crítica de Marcelo Artal - La letra indómita

A grito pelado.

Las comedias dramáticas basadas en hechos reales son difíciles, porque requieren de una alquimia difícil de lograr: una historia interesante + un guion que sepa contarla con comicidad + un director que logre plasmar el guión en la pantalla. Florence Foster Jenkins logra la proeza y entrega, sin lugar a dudas, una comedia memorable.

Es verdaderamente increíble la historia de esta acaudalada aficionada al canto, que en manos de cualquier otro director podría haber terminado en un melodrama punzante. Stephen Frears, sin embargo, rescata la esencia del relato con humor y se escapa con elegancia de los golpes bajos. Como resultado, nos hace reír con una historia triste, sin que sintamos culpa al respecto. Por supuesto que, además de la fantástica dirección y ambientación del filme, contribuyen enormemente al éxito del mismo las actuaciones de un soberbio reparto, donde se destacan la infalible Meryl Streep, un Hugh Grant quizás inédito y Simon Helberg, con un personaje excéntrico y divertido.

La peculiar historia de Florence Foster Jenkins merecía contarse con grandeza y Frears lo logra. Es una comedia dramática divertida y original que arranca sonrisas y rescata ciertos valores del espíritu humano, sin incurrir en las típicas recetas de Hollywood.