Feliz día de tu muerte

Crítica de María Paula Rios - Fandango

La estructura narrativa de 'Hechizo del tiempo', una dosis de sangre a lo 'Scream' y... ¡voilà!

Tree (Jessica Rothe), una joven que se encuentra en la universidad, despierta confundida en la habitación de un chico desconocido. La resaca no la deja recordar nada de la noche anterior. Apresurada, y avergonzada, sale de la morada del “looser” y empieza su periplo diario, hasta llegar a la fraternidad en la que habita.

Es su cumpleaños y todo parece ir de maravillas, inclusive tiene una fiesta a la noche. Cuando sale rumbo reunión, en el camino se topa con una cajita de música, preludio de su propio asesinato ejecutado por una persona con la máscara de BB, la mascota deportiva de la universidad. Es así, que Tree despertará todos los días de su propia muerte, hasta ir encontrándole un sentido a este bucle temporal.

En cuanto a su disposición narrativa, la fórmula de Feliz Día de tu Muerte es harta conocida, alude directamente a Hechizo del tiempo de Harold Ramis, y por supuesto que la película es consciente de esto, inclusive hacia el final se expresa literalmente en un diálogo. También hace poco tiempo hubo otro film, Si no despierto, que repetía la estructura pero en clave dramática.

Aquí, a este efectivo recurso, Landon le añade el factor horror, asesinato ¿sangriento? + cosmos de universidad, copiando (más que homenajeando) a cintas como Scream de Wes Craven. Pero cuando a una receta probada se le alteran los ingredientes es muy probable que falle y el sabor clásico se pierda. A Feliz día de tu muerte no se le cae una idea, en vez de aprovechar esta recursividad narrativa para innovar, se vuelca a los clichés propios del género: scream queen torturada que debe descubrir su asesino.

La película no asusta, descartamos una puesta en escena ingeniosa de los asesinatos, y a pesar de ser consciente de que es una parodia, tampoco entretiene. La hibridación genérica aquí solo sirve para acumular estereotipos, encima se nos planta un final “sorpresivo” con vueltas de tuercas inútiles y forzadas. A esta altura nos preguntamos ¿Era necesario?, si para un público teen y cool que gusta de los crímenes blancos acompasados por melodías de Demi Lovato.