Espiral: El juego del miedo continúa

Crítica de Jorge Bernárdez - Subjetiva

Volvió Jigsaw, el asesino serial que se dedica a masacrar gente de maneras imaginativas y truculentas. Cómo que volvió si estaba muerto, puede preguntar el espectador desprevenido. Pero en el mundo del cine todo puede pasar, así que El juego del miedo se reinicia por otros medios.

En el comienzo un policía de civil persigue a un ratero que roba una cartera a una mujer en un parque de diversiones. El hombre termina en unos túneles inmundos del subterráneo y una grabación le dice que por ser un policía corrupto, debe pagar y le explica cómo escapar del sofisticado sistema con la condición de que debe arrancarse la lengua. Un comienzo poderoso que nos pone de nuevo dentro del clima de una franquicia que impuso el terror pornográfico que se especializa en mostrar humanos despedazados.

Pero en esta edición el protagonista es Zeke Bancks (Chris Rock), un policía mal llevado que es odiado por sus compañeros porque “entregó” a un policía corrupto. Bancks es hijo de un ex jefe de la fuerza llamado Marckus (Samuel L Jackson) que al revés de su hijo, es venerado por los miembros de la fuerza, ya que bajo su mando la policía de la ciudad recuperó el prestigio y aunque ahora está retirado, sigue manteniendo sus contactos. El asesinato con el que empieza la historia termina en manos de Zecke y la investigación rápidamente les va a traer a la memoria a Jigsaw. ¿Volvió el mismísimo asesino serial o es un imitador? El lugar del crimen está lleno de pistas que empiezan a multiplicarse y rápidamente nos enteramos de que se trata todo: las víctimas son esta vez policías corruptos.

Se empiezan a suceder los crímenes truculentos, Chris Rock está toda la película como enloquecido, su personaje se está divorciando, la mujer no le deja ver al hijo y ni su propio padre le habla desde hace más de un año. Ahora encima está metido en una investigación con un compañero novato y que claramente lo tiene como blanco, porque los mensajes grabados del nuevo Jigsaw van dirigidos directamente a Zecke.

Una hora y media de vértigo y crímenes sangrientos, actuaciones crispadas, algunos efectos chapuceros como un flashback en el que Chris Rock debe parecer más joven y lo hacen poniéndole una gorra de béisbol al revés. Alguien podrá decir que no tiene mucho sentido y quizás tenga razón, pero la cuestión se pasa rápido aunque algunas cosas sean un poco molestas. Veremos qué pasa con este reboot de una franquicia que nos regaló algunas buenas películas. En cuanto a Chris Rock, esperemos que vuelva al stand up que es sin dudas el lugar donde sabe moverse con mayor comodidad.

ESPIRAL
Spiral: From the Book of Saw. Estados Unidos / Canadá, 2021.
Dirección: Darren Lynn Bousman. Guión: Josh Stolberg y Pete Goldfinger. Intérpretes: Chris Rock, Max Minghella, Samuel L. Jackson, Marisol Nichols, Dan Petronijevic, Patrick McManus, Richard Zeppieri, Ali Johnson, Zoie Palmer, Dylan Roberts. Producción: Mark Burg y Oren Koules. Duración: 93 minutos.