Errata

Crítica de Juan Carlos Fontana - La Prensa

Variaciones sobre el engaño

Un enigmático y sugestivo policial, sin policías a la vista, es el que logra Iván Vescovo en su "opera prima", filmada en blanco y negro y por momentos con un estilo nervioso, con cámara en mano e imágenes esfumadas.

"Errata" parte de la historia de Ulises (Nicolás Woller), un joven fótografo, al que su novia abandonó y que se entusiasma con una chica que estudia letras y se llama Alma (Guadalupe Docampo).

Alma tiene una personalidad escurridiza y para Ulises se convierte en un personaje tan misterioso, como fascinante. Eso hace que él se enamore pérdidamente, mientras la muchacha lo engaña con otro (y otros).

EL LABERINTO

A medida que avanza la historia el espectador irá descubriendo junto con Ulises una serie de circunstancias que se van asociando unas con otras, hasta llegar a construir una suerte de laberinto, en el que el tiempo juega un papel especial, como sucede en la novela de Jorge Luis Borges "El jardín de los senderos que se bifurcan".

Esto no es casual, porque Alma que lee mucho y le gusta estudiar, mantiene una relación secreta con Viñas (Claudio Tolcachir), uno de sus profesores de su facultad, que trabaja en una librería de viejo en la que su dueño, Oribe (Arturo Goetz) guarda con celoso orgullo un ejemplar, de "El jardín de senderos que se bifurcan", de Borges, que contiene una errata. La que consiste en una frase que por su cuenta intercaló en el ejemplar un linotipista -según se dice- en 1941, el año en que se publicó el libro. Eso convierte al ejemplar en algo único, codiciado por coleccionistas y que vale una fortuna. Detrás del libro único, dan vueltas varios jóvenes, con el afán de robarlo y venderlo bien.

EJEMPLAR UNICO

Un día en que Alma desaparece desesperado Ulises recorre los lugares que ella frecuentaba, como la librería en la que trabaja Viñas. Habla con el dueño y éste le habla sobre el famoso libro de Borges. Por eso, más tarde Ulises también se empecina en robar el libro, pero no todo saldrá el joven lo había planeado.

Con un intrincado juego narrativo, en el que escenas y situaciones se reiteran una y otra vez, abriendo nuevos enigmas al espectador, el filme se apoya en un clima ominoso, a la vez que el blanco y negro le otorga la dosis de suspenso que la historia necesitaba.

Correctos en sus actuaciones Nicolás Woller y Guadalupe Docampo, como los enamorados; del casting interpretativo se destacan Claudio Tolcachir y Arturo Goetz, quiene le otorgan a sus papeles el misterio y la oscuridad que el filme requería de sus personajes.