Entre tragos y amigos

Crítica de Marvila - Cine & Medios

Crisis grupal

Antoine tiene cincuenta años, luce bien, peina canas, es delgado, hace ejercicios, se cuida en las comidas y, aunque está casado, no se priva de seducir jovencitas, acción que lleva adelante con éxito. En el día de su cumpleaños, mientras corría una maratón, Antoine sufre un infarto.
Toda una vida de cuidado, alimentándose de forma saludable, sin fumar, ni beber alcohol, ni drogarse, y Antoine termina infartado a los cincuenta años. Esto lo lleva a replantearse la forma en la que va a vivir en adelante. Decide que va a fumar, tomar y comer como no lo hizo antes, algo que sus amigos verán con sorpresa, además de ser testigos de cómo, por este cambio de actitud, cambia también su relación con ellos.
La comedia francesa presenta desde hace tiempo historias de grupos de amigos que, a raíz de un conflicto que funciona como disparador, descubren secretos guardados entre ellos, relaciones pasadas, y replanteos de sus propias vidas. No es original la propuesta, pero está bien actuada y dirigida sin estridencias.