Enterrado

Crítica de Rodolfo Bella - La Capital

Solo contra el mundo

“Enterrado” es un excelente ejercicio narrativo. Es que la hora y media que dura el filme es como un largo plano secuencia en el que sólo se ve la cara del actor Ryan Reynolds peleando por salir del ataúd en el cual fue enterrado vivo. Cortés se las ingenia para construir un relato agobiante y extender el suspenso hasta el final. Y lo logra a pesar de algunas excepciones a la verosimilitud. Pero cuenta a favor con el trabajo de Ryan Reynolds y un guión con una única y buena idea que gira en torno a la metáfora de un hombre arrasado por razones burocráticas y estratégicas, tan consistentes como los cientos de kilos que cubren su cajón. Y abrumado por situaciones extraordinarias desde lo cinematográfico como ocurre en “La soga”, de Hitchcok, o argumentales, como en “El proceso”, de Orson Wells.