Elles

Crítica de Laura Osti - El Litoral

La mirada de las prostitutas

Anne (Juliette Binoche) es periodista y escribe para la conocida revista Elles. Justamente ahora está concentrada en su próximo artículo que refiere a la prostitución estudiantil en París, ciudad donde vive y trabaja.

Anne está casada con el ejecutivo de una firma privada, Patrick (Louis-Do de Lencquesaing), con quien tiene dos hijos: un adolescente y un niño más pequeño.

Esta película es la segunda realización de ficción de la documentalista polaca Malgoska Szumowska, quien es también coautora del guión. Pero hay que decir que pese a calificar como ficción, “Ellas” está pensada como un trabajo de investigación por parte del personaje protagónico, quien se involucra un poco más de lo conveniente, llegando a sentir una influencia en su vida privada a partir de esa experiencia.

Es que Anne se ha introducido en el territorio de las jóvenes que alquilan su cuerpo para pagarse los estudios universitarios. Ha realizado entrevistas con algunas de ellas y la cuestión quizás empezó a tomar un sesgo más inquietante cuando la periodista recurre al truco de pagar, como si fuera un cliente, por el tiempo que las jóvenes le deben dedicar para contar sus experiencias.

Siendo Szumowska de origen documentalista es de suponer que este recurso narrativo no es casual ni inocente.

La prostitución, aun cuando se considera la profesión más antigua del mundo, sigue siendo una cuestión tabú incluso para las sociedades más evolucionadas. Lo que intenta hacer esta película es ponerle voz a la mirada femenina sobre este asunto y más particularmente, a la mirada de las prostitutas.

Mientras Anne anda con el artículo en la cabeza todo el tiempo, tiene que seguir cumpliendo con los otros roles: madre y esposa. Cada uno de sus hijos plantea desafíos diferentes, pero igual reclaman su atención. El marido, una figura un tanto light y bastante ausente, parece mentalmente secuestrado por sus obligaciones laborales, por lo que la organización del hogar resulta ser casi de la exclusividad de ella.

Es así que el relato va alternando entre los testimonios de Charlotte (Anaïs Demoustier) y (Alicja) Joanna Kulig, y las otras tareas que debe llevar adelante Anne cada día. La primera proviene de un hogar parisino típico de clase media baja y la posibilidad de obtener dinero rápido fue lo que más la sedujo, aunque a medida que avanza el relato, se percibe que el contacto con clientes de otro sector social, más elevado, pareciera hacerle olvidar por un rato sus orígenes humildes. En tanto que Alicja refleja otra realidad: es polaca y ha llegado a París para estudiar. Sus gastos están a cargo de su madre (residente en Polonia), pero como la joven es ambiciosa y aventurera, se involucra en la prostitución de alto perfil, más por lujuria y el placer de darse gustos caros que otra cosa.

Invitación a pensar

Las dos chicas, sin embargo, ocultan ese aspecto de sus vidas a sus familias y en el caso de Charlotte, también a su novio, un chico del mismo origen que ella, atisbándose allí el germen de conflictos, por el momento apenas incipientes, pero que podrían desencadenar alguna crisis en cualquier momento.

Al comenzar su investigación, Anne pretende asumir un papel profesional y distante, pero poco a poco irá aflojándose hasta intimar con las prostitutas casi como si fueran amigas. Ello produce efectos en su vida privada y le aporta un nuevo punto de vista acerca de las relaciones sociales, incluso las de su entorno más cercano.

Szumowska solamente trata de mostrar de manera explícita una realidad a la que generalmente se alude mediante rodeos y eufemismos, poniendo en evidencia que es más común de lo que uno puede imaginar y tal vez no tan ajeno, ya que la mayoría de los clientes de estas chicas son “maridos maduros aburridos”, hombres que provienen de hogares aparentemente normales.

El film no juzga, no sanciona, no cuestiona, simplemente invita a pensar en varias cuestiones, pero sobre todo, en el lugar que se le da al erotismo en la vida cotidiana y a las posibilidades de explotación y los riesgos que ofrece.