El viaje más largo

Crítica de Matías Lértora - Cines Argentinos

Hace poquito más de un mes se estrenó la mediocre y previsible Lo mejor de mi. ¿Qué comparte con El viaje más largo? Pues se trata de otra (¡Si, otra!) adaptación de una novela de Nicholas Sparks.
En esa crítica hice una breve explicación de cómo este señor había ganado su prestigio y el tipo de historias que escribe.
Destaqué que salvo las dos primeras adaptaciones que hicieron de su obra - A walk to remember (2002) y The notebook (2004)- el resto fue un completo fiasco, y este estreno no es la excepción.
Una pregunta obvia para hacer es el por qué se siguen haciendo estas películas basadas en novelas tan pobres y la respuesta es porque son baratas y les va relativamente bien. Es un negocio que cierra.
Pero aún así sería genial que ese negocio crezca con adaptaciones de autores ignotos o se apueste en grande a películas románticas chicas. Un gran ejemplo es el film Copenhagen (2014), espectacular película romántica que no se va a estrenar en argentina.
Volviendo a El viaje más largo, el gran dato para destacar es que Sparks rompe su fórmula y no hay enfermedades terminales en el final. Aún así mantiene su estilo y el desfile de clichés es interminable.
Seguro que las chicas van a delirar con los abdominales bien marcados de Scott Eastwood (el hijo de Clint), quien empieza a pisar fuerte en Hollywood pero que aquí no demuestra ninguna dote magnífica. Aunque también vale aclarar que el guión no se lo permitió.
Lo mismo sucede con su partener Britt Roberston, otra joven promesa que aquí cumple su rol de chica dulce y centrada.
En cuanto a lo cinematográfico, el director George Tillman Jr ha demostrado que puede contar historias con elocuencia tal como hizo con Hombres de honor (2000), lo que deja más en evidencia el pobre guión porque desde el aspecto técnico la película está bien e incluso su fotografía llama la atención con lindos planos.
En definitiva, El viaje más largo es una trillada película romántica pero no tan mala como su antecesora. Un sector del público femenino la disfrutará, pero no mucho más que eso.