El silencio de otros

Crítica de Martín Chiavarino - Metacultura

Contra el olvido

El documentalista estadounidense Robert Bahar y la española Almudena Carracedo unen sus esfuerzos para realizar un film insoslayable y estremecedor que interpela la conciencia del espectador sobre el proceso de los reclamos por la memoria, la verdad y la justicia en España, respecto de los crímenes de lesa humanidad durante y después de la dictadura reaccionaria de Francisco Franco, que tuvo lugar entre el año 2010 y el 2016.

Con una narración clara y concisa basada en entrevistas y seguimiento de personajes durante el proceso de creación de la querella judicial El Silencio de Otros (2018), film producido por Pedro Almodóvar, entre otros, explica pedagógicamente la historia de España desde la Guerra Civil Española hasta la muerte de Franco y la promulgación en 1977 de la Ley de Amnistía y el acuerdo de perdón mutuo, conocido como Pacto del Olvido, una ley que prohíbe que los genocidas del régimen franquista sean juzgados acorde con la ley, legislación creada para mantener en el poder a los principales funcionarios ejecutivos, legislativos, judiciales y policiales en la cúpula estatal. Esta ley permitió que el aparato represivo franquista se mantenga en funcionamiento varios años después de la muerte del dictador y que los genocidas se mantengan en sus puestos a pesar de los reclamos de las víctimas.

El opus recrea el proceso que siguió a la dictadura explicando la transición didácticamente para comprender cómo la sociedad española aceptó estas leyes de impunidad disfrazadas de una amnistía. El pasado se entierra para crear un futuro, pero como las victimas demuestran con sus discursos y vivencias el olvido es completamente imposible y la verdad siempre se abre camino. Solo a través de ella una sociedad puede verdaderamente cerrar sus heridas. Olvidar y ocultar el pasado solo permite contener un impulso que con los años se vuelve insoportable y termina explotando cuando la olla llega a su punto de máxima presión. El relato también revela cómo el gobierno conservador y derechista de Mariano Rajoy del Partido Popular bloquea la querella de los organismos de Derechos Humanos de España protegiendo a los asesinos, torturadores y secuestradores de niños del régimen franquista. Para que estos sean juzgados, los organismos de Derechos Humanos llevan su reclamo a Argentina, donde se lleva a cabo un proceso muy similar que ya estaba avanzado cuando la causa cobra impulso en el año 2010, recayendo en el juzgado de María Servini de Cubría, quien intenta indagar a los acusados a pesar de las trabas que pone el gobierno español, que amenaza incluso con romper sus relaciones diplomáticas con Argentina si la jueza le toma declaración a las víctimas del terrorismo de estado durante el oprobioso régimen franquista.

Desde el odio que aún impera en España, reflejado en los disparos sobre unas estatuas recientes que conmemoran a las víctimas de la dictadura franquista hasta el mantenimiento de calles que homenajean a los perversos genocidas y pasando por el desconocimiento de parte de la juventud de la historia española, el documental narra el creciente interés por la memoria de esa época, la necesidad de cerrar las heridas a partir de la revisión de un pasado que los criminales quieren clausurar a su conveniencia y la pérdida de apoyo del franquismo desde la muerte del dictador hasta el presente.

Al fracaso de las primeras querellas y el estancamiento momentáneo de la causa a pesar del crecimiento de querellantes le sigue una etapa de búsqueda y creación de lazos entre distintas organizaciones de Derechos Humanos en España y de Argentina para generar un movimiento más amplio que impulse la toma de conciencia en la ciudadanía en torno a conocer la verdad y juzgar a los culpables para recuperar la memoria.

El Silencio de Otros también marca los paralelismos, las diferencias y las similitudes entre las leyes de amnistía españolas y las de los países latinoamericanos que también soportaron dictaduras genocidas que cometieron crímenes atroces de lesa humanidad y los impulsos de las organizaciones de Derechos Humanos allí para construir una memoria democrática a partir de la verdad con el fin de impartir justicia a los culpables de los crímenes.

El film de Bahar y Carracedo es así un gran homenaje a las víctimas de la dictadura franquista basado en la palabra de ellos mismos, sus emociones ante el comienzo del fin de la impunidad y la reivindicación histórica de conocer la verdad y recibir justicia para ellos y sus parientes asesinados brutalmente. La historia se abre paso aquí una vez más como si las palabras que Luis Cernuda logró componer en su poema 1936 repicaran sin cesar para demostrar que todo crimen tiene su castigo, que la única forma de no repetir el pasado es enfrentando los fantasmas del olvido y que el ejemplo de la lucha contra las injusticias siempre se propaga.