El sereno

Crítica de Adolfo C. Martinez - La Nación

El sereno: atmósfera misteriosa e inquietante

Fernando, un hombre solitario y atormentado, consigue trabajo como sereno nocturno en un depósito que será demolido. El edificio posee una confusa red de pasillos y escaleras que lo convierten por las noches en un lugar aterrador. Una de esas noches Fernando escucha ruidos extraños provenientes de un rincón de ese depósito y halla abierta una reja que debería estar cerrada. Desde ese instante nada será lo mismo para el taciturno sereno, que se internará en situaciones cada vez más inquietantes. Sobre esta base los directores Oscar Estévez y Joaquín Mauad lograron una historia que mezcla terror y misterio, elementos por los que debe transitar el personaje animado con solvencia por Gastón Pauls.