El repostero de Berlin

Crítica de Diego Faraone - Denme celuloide

Esta notable película comienza con un encuentro casual de dos hombres en una cafetería de Berlín, que deviene pronto en un entrañable affaire homosexual. Uno de los implicados es un solitario repostero, y el otro un hombre casado, con esposa y un hijo en Israel. Las visitas mensuales del segundo al primero cesan un día, y el repostero sale en su búsqueda. Poco le lleva enterarse del deceso de su amante en un accidente, por lo que decide viajar a Israel con la intención de conocer a su familia. Infiltrado como un ayudante de cocina, intenta entonces descubrir desde cerca los detalles de la vida de la esposa del fallecido.