El príncipe encantador

Crítica de Melody San Luis - Fancinema

PRINCESAS PERTURBADAS Y ENCANTADORAS

El príncipe encantador presenta una historia en la que toman vigor los discursos actuales. Sin embargo, las ideas se vuelven un poco contradictorias al final y mantiene ciertas estructuras tradicionales durante todo el film. La mayor fortaleza de la película está dada por la parodia a las princesas de Disney.

Philipe es el Príncipe Encantador porque cuando nació una ex pareja del padre lo hechizó. Su condena es ser encantador a tal punto que ninguna mujer puede resistírsele. De esta manera, la hechicera se asegura que reine el desamor en el pueblo, tal como ella lo sintió. Es, ahora, el príncipe quien recibe el hechizo y para poder deshacerlo cuenta con la ayuda de Lenore, una ladrona con grandes habilidades para la aventura. Ella le enseña a defenderse y juntos enfrentan el camino. Lo que Philipe no sabe, y eso es porque ella va disfrazada de hombre, es que es la misma mujer de la que se enamoró uno de los días que caminaba por el pueblo, la única que no quedó encantada al verlo.

Es imposible no comparar esta historia con todo el entorno de producciones referidas a los cuentos de hadas. El príncipe encantador, en este sentido, manifiesta los cambios actuales con respecto a los puestos de poder de la mujer. Pero, a la vez, recae en el pensamiento binario al dividir, a través del hechizo, entre hombres y mujeres.

Lenore no viste como las mujeres de su época. Incluso se burla de Cenicienta, Blancanieves y la Bella durmiente. Lo cierto es que en el final este aspecto da un vuelco que genera varias contradicciones. Pero más allá de eso, podemos resaltar que Philipe y Lenore viven un amor en el que esa palabra funciona como camino y no como un fin. Las aventuras que viven juntos son las que fortalecen su relación.

En cuanto a la parodia, las tres princesas de Disney aparecen llamando mucho la atención. Ellas son expuestas desde un perfil bastante humanizado en el que sus tragedias parecen tan mundanas que se tornan ridículas. Al no tener idealización, Cenicienta, Blancanieves y Bella durmiente muestran al desnudo sus traumas. Sin duda, la mejor propuesta de este film son estas excéntricas muchachas. Esto se debe a que la historia principal no se distancia demasiado de lo que ya se ha hecho. Incluso, hace poco tiempo, WiFi Ralph ya presentaba una parodia de las princesas, aunque aquí está dado con un tono más oscuro.