El irlandés

Crítica de Isabel Croce - La Prensa

El tema de la violencia ocupa un lugar importante en la filmografía de Scorsese. Desde "Taxi Driver" a "Calles peligrosas", con "Toro Sentado", "Cabo de Miedo", "Pandillas en Nueva York" o "Silencio", el tema de la calle, el miedo, lo ilegal, la fuerza bruta escriben una línea temática de este realizador de orígenes sicilianos nacido en Queen, criado en Little Italy y habitante en la adolescencia de la zona del Bronx.
"El Irlandés", basada en el libro "O“ que pintabas casas" de Charles Brandt, está centrado en los testimonios que Frank Seeran, un ex camionero y veterano de guerra que pasó la mayor parte de su vida como asesino a sueldo de la mafia, particularmente de Russell Bufalino y Jimmy Hoffa, peso pesados del mundo del hampa.

El filme toma a un Seeran viejo y artrítico, refugiado en un geriátrico, que con humor y pocos prejuicios, relata su vida. Vida que según el libro de Brandt, un fiscal del estado de Delaware llegó a contar más de 25 víctimas de asesinatos por encargo y que habría incluído la figura del sindicalista e integrante del crimen organizado, Jimmy Hoffa, líder camionero desaparecido en 1975.
 
HAMPA EN FILADELFIA 
Con fluidez narrativa que no basta para tolerar excesivos 210 minutos de proyección, el trío De Niro (Seeran), Joe Pesci (Bufalino), Al Pacino da una lección de actuación. Representaciones que pasan por tres décadas a partir de los 50 en un relato no cronológico que los incluye jóvenes gracias a un rejuvenecimiento digital notables. Parte de la historia del hampa en Filadelfia durante de esas épocas pasa por los recuerdos de viejo Seeran que habría muerto poco visitado por la familia (dos mujeres, cuatro hijas) y sin arrepentirse de ninguno de sus crímenes.

Filme de mafias y conspiraciones, de plataformas capaces de sostener candidaturas presidenciales (los Kennedy son citados una y otra ve) y en las que las huestes de Hoffa al frente del sindicato de camioneros, provechaba el gremio para lavar dinero sucio bajo la excusa de los polémicos fondos de pensión.

La película de Scorsese retoma el tema de la impunidad, de las carreras delictivas que no necesariamente culminan en la cárcel y donde la vida familiar parece esconder la paz que está ausente de la habitual trayectoria de los señores sin ley.
Maratón de crímenes, traiciones de alto grado, amistades falsas y ese cinismo cargado de humor que enmascara la simpatía del tal Seeran.

"El Irlandés" desnuda el vicio de la violencia, la ambición desmedida y el cinismo permanente que sólo parece interrumpirse cuando el mismo Seeran se siente juzgada por la pequeña Peggy, la más pequeña de sus cuatro hijas mujeres.

Luego de los problemas que resultan de las producciones independientes con su arrastre de escasez de salas de exhibición, "El Irlandés" inicia su carrera con el aval de un relato notablemente interpretado por el trío italoamericano De Niro, Pacino- Pesce, la autenticidad del tratamiento de un tema atrapante y un cuidado formal explícito en el montaje y la fotografía de Rodrigo Blanco.