El intérprete

Crítica de Marcela Barbaro - Subjetiva

“El intérprete”, de Martín Šulík
Por Marcela Barbaro

Luego de su estreno en el Festival de Cine de Berlín, llega a la cartelera argentina El Intérprete del directoreslovaco Martin Šulík (Gypsy; The garden). Inspirada en el libro The Dead Man in the Bunker de Martin Pollack, la película narra la relación de dos hombres mayores, vinculados por una tragedia en relación al nazismo, ante la cual irán en busca del pasado que los acerque a la verdad.

Ali Úngar (interpretado por el director checo Jiri Menzel) tiene 80 años, es viudo y traductor. De pequeño perdió a sus padres durante el nazismo en manos de un oficial de la SS, a quien descubre a través de un libro que ha escrito. A pesar de su carácter introspectivo, va en busca de venganza y viaja hasta Viena para encontrarlo. Allí, lo atiende su hijo, Georg Grauber (Peter Simonischek), también solo y mayor, quien parece vivir muy bien de la jubilación como maestro de idiomas. Ante la acusación de Ali, Georg no niega los hechos, sino que se muestra consciente de los crímenes de su padre.

Ese primer inicio desconcertante, tenso y dramático, se volverá una oportunidad para los dos cuando emprendan un viaje con el fin de investigar los hechos perpetrados por el padre de Georg. En el camino encontrarán testigos y documentación que verifique lo sucedido.

El intérprete se construye, principalmente, como una road movie, donde el viaje es el medio para saldar cuentas pendientes, como una búsqueda interna en relación a lo perdido. La “aventura” de esa travesía se matizará con dosis de humor, que descomprimen la tragedia. Pero también, el relato se inscribe en las típicas “películas de amigos” o buddy films, en la que dos hombres con personalidades opuestas, en éste caso un austríaco simpático y desprejuicioso, y un checo serio y conservador, los junta el destino por un tema en común. Ambos comparten situaciones que los vinculan a partir de las adversidades que enfrentan a lo largo del viaje. Así, va naciendo una camaradería, que parecía imposible al inicio, y a la altura de sus vidas.

Como si Sulik no se permitiese del todo tantos desvíos narrativos a la historia, agrega un componente documental en relación al tema histórico: desde una filmación testimonial de una sobreviviente al nazismo, hasta fotos reveladoras de la crueldad sobre la población judía. De fondo, el subrayado musical de un nostálgico leit motive,divide las secuencias.

La elección de la dupla de actores, es uno de los grandes aciertos de El Intérprete, como el giro inesperado hacia el final, en el cual termina de revelarse la mirada del director eslovaco sobre la vejez, el peso de la culpa y la memoria.

EL INTÉRPRETE
The Interpreter. Austria, Eslovaquia y República Checa, 2018. Director: Martin Sulik. Guionista: Marek Lescák , Martin Sulk. Intérpretes: Anita Szvrcsek , Jirí Menzel , Peter Simonischek , Reka Derzsi , Suzana Mavréry. Director de fotografía: Martin Strba /Música: Vladimir Godár/ Montaje: Olina Kaufmanová. Duración: 103 minutos.