El ganador

Crítica de Marcelo Oliveri - El rincón del cinéfilo

Destacadas actuaciones en una historia densa muy bien realizada

Desde que el cine existe los boxeadores y luchadores han tenido presencia con sus historias en la pantalla grande, como “Rocky”(1976), pasando por “Toro Salvaje”(1980), “El campeón”(1931), “El luchador” (1949), temática que también fue considerada en la producción argentina, incluso en el periodo mudo (“El toro salvaje de las pampas”, y “La vuelta del toro salvaje”), para llegar a “Gatica, el mono”(1993), al cual se suma, entre otros títulos, “Diez segundos” (1948), “Su última pelea” (1949), “Luna Park” (1959), “Nosotros los monos” (1958), “Los golpes bajos” (1972) y “I love you...torito”(2001).

Como podrá deducirse, el mundo del boxeo seduce, o al menos despierta el interés, a un gran sector del público.

En “El ganador”, más allá de narrar la historia de un boxeador desarrolla un drama basado en hechos reales. Inspirada en la historia de “Irish” Micky Ward (Mark Wahlberg), campeón de la Federación Mundial de Boxeo en la categoría Welter Junior, y a la relación que mantiene con su medio hermano mayor Dicky Eklund (Christian Bale), quien lo precedió como héroe del boxeo en su pueblo natal, para luego tirar por la borda su talento y todo lo conquistado con sus actitudes y conducta en la vida.

Con buena dosis de combates muy bien filmados, y mucha adrenalina por parte de los espectadores, transcurre esta entretenida producción de una familia que depende del accionar de un boxeador para sobrevivir.

La realización de David O. Russell no será favorita para ganar el Oscar, pero se encuentra entre las que podría considerarse entre las diez mejores películas que han abordaron el tema. Si bien esto quizá no quiera decir mucho logra sus objetivos y convence.

Lo importante es que se trata de una producción que por su enfoque no sólo interesa a los amantes del boxeo, sino también a quienes nunca se interesaron por este deporte, ello merced a los méritos artísticos que suma en su integridad.

Todos sabemos, por experiencias trazadas cinematográficamente, u otros medios, o por referencias personales, algo sobre el mundo del boxeo, y eso está muy bien reflejado en éste film. Los problemas con la droga, los amigos y familiares que quieren salvarse a toda costa sin importar la vida son parámetros que nos invitan a reflexionar.

Uno termina preguntándose si el boxeo es un deporte o un factor que deteriora de los seres humanos. Cuesta creer que todavía en pleno siglo XXI haya gente que se apasione y pague por ver a dos personas destruyéndose sobre un ring.

La historia esta bien estructurada en el guión, realizada con mano segura en lo audiovisual y en la dirección de actores. Son muy buenas las actuaciones de Mark Wahlberg y Christian Bale por lo convincente y conmovedor. La fotografía y el ritmo de esta historia hacen muy llevaderas las acciones. Todo lo apuntado califica a la obra como una realización que habla del mundo del boxeo con sus derivados.

No va a pasar desapercibida.