El futuro llegó

Crítica de Pablo E. Arahuete - CineFreaks

Pese a todo el sol siempre sale

Detrás de la palabra “progreso”, hay miles de sueños derrumbados, cientos de mitos sepultados y un tendal de historias de exclusión social producto de cambios de matriz de producción, o abruptos reemplazos de actividades en beneficio de intereses económicos para pocos. Ingeniero White, en Bahía Blanca, es un fiel exponente de las contradicciones que siempre atravesaron este bendito país, la huella donde la serpiente repta y saca sus colmillos con discursos hipnóticos ante la población y ofrecimientos de futuro que nunca llegan.

Primero con los ferrocarriles, hasta el slogan de la California Argentina como se creía allá por los ’50, punto clave de un puerto comercial cuya actividad primaria era la pesca y luego con la instalación del polo petroquímico, conglomerado de multinacionales generadoras de catástrofes ambientales y enfermedades en la población por falta de mantenimiento y avaricia.

En el medio de esa dinámica perversa, la voz de los damnificados, desempleados muchos de las fábricas o sencillamente familiares acentados en el territorio por décadas, que de un día para el otro vieron truncadas sus ansias de progresar, destruída la fisonomía y geografía de pueblo en expansión.

El documental del grupo Cine Insurgente indaga sobre las aristas invisibles detrás de los slogans, desmenuza esa mal llamada redistribución de la riqueza, pero a la vez encuentra en la resistencia del pueblo de Ingeniero White, en su necesidad de contar otra historia, el puente multiplicador para lanzarse como colectivo que se opone al mal llamado progreso.

Al dar voz a quienes no la tienen, al dar aire a aquellos que viven bajo la atmósfera viciada del mercurio -y vaya a saber qué más- al dar una cuota de esperanza cuando llegan con sus cámaras y documentan una lucha silenciosa, persistente, tenaz como esa nube de contaminación y desidia, que surca los cielos de Bahía Blanca.

Para aquellos que quieran saber algo más de una realidad que llega a cuenta gotas a los medios nacionales aunque ya no se puede ocultar, y que ya no se puede tapar como ese sol que pese a todo sigue saliendo.