Escuadrón Suicida

Crítica de Martín Pérez - DiarioShow

Los chicos malos en versión de héroes

“Escuadrón suicida", un filme esperado y diferente. Sería exagerado decir que el filme es “aburrido” porque en verdad entretiene por momentos, aunque los principales problemas vienen de su abultado elenco, a quienes primero hay que presentar y luego desarrollar.

La naturaleza del mal, según Immanuel Kant, es por posicionar el incentivo del amor propio por sobre el de la ley moral, dándonos a nosotros mismos un valor absoluto que no es el verdadero, en relación con los demás. Según el filósofo, sería, más que por egoísmo, lo que conocemos pecaminosamente como “vanidad”, sujetada a la supervivencia. Por ese motivo, escondido dentro nuestro, es que disfrutamos del villano, en tanto no mate al políticamente correcto superhéroe, una llamada de la naturaleza que es adecuada a nuestras vidas porque si bien funcionaría como un espejo, la pantalla de tela en la que vemos un filme es nuestro resguardo, desatamos la maldad sentados y comiendo pochoclos.

Tan esperada fue “Escuadrón Suicida”, por mostrarnos los chicos malos en versión “héroes”, desquiciados, ladrones y asesinos que disfrutan de su maldad pero, como deben atenerse en hacer el mal para lograr el bien, nadie puede reprocharnos el festejo. Desde hace un año venimos viendo imágenes, adelantos y tráilers de una película que apuntaba a ser un punto de quiebre en las películas de acción y aventuras basadas en un cómic. Un Joker/Guasón que helaba la sangre, una bella rubia que acaparaba la atención, Will Smith como sicario y varios elementos más que colmaban las expectativas. Hoy llega a las salas argentinas “Escuadrón Suicida” y se evidencia como pocas veces, por qué los tráilers son un proyecto publicitario engañoso.

Temible escuadrón

Tras la “muerte” de un superhéroe muy famoso (por las dudas que algún desprevenido no haya visto “Batman v Superman” no lo adelanto), la funcionaria Amanda Waller (Viola Davis) consigue el permiso gubernamental para crear un escuadrón de villanos que trabajen para el bien. Son lo peor de lo peor y, encarcelados y sin ninguna esperanza, se los puede obligar a que cumplan órdenes. El grupo se compone por el asesino a sueldo “Deadshoot” (Will Smith), la novia de Joker, Harley Quinn (Margot Robbie), el ladrón de bancos “Capitán Boomerang” (Jai Courtney), el monstruoso Killer Croc (Adewale Akinnuoye-Agbaje), el meta humano piromaníaco “El diablo” (Jay Hernández) y de muy corta aparición, “Slipknot” (Adam Beach). El líder del grupo en las tareas será el militar Rick Flag (Joel Kinnaman), pareja de la antropóloga June Moone (Cara Delevigne), que comparte cuerpo con la bruja Encantadora, de gran poder y que también será parte del equipo hasta que su parte maléfica se escape y se una a su hermano en lo que determinará el conflicto del filme cuando ambos quieran conquistar el mundo y sea el Escuadrón Suicida el que deba intervenir.

Algo... entretiene

Sería exagerado decir que el filme es “aburrido” porque en verdad entretiene por momentos, aunque los principales problemas vienen de su abultado elenco, a quienes primero hay que presentar y luego desarrollar. Slipknot sólo está porque sería un pecado para los fans de DC Comics que no aparezca en el filme, pero está, con mucha suerte, 15 minutos de las más de dos horas que dura el corte final. Y allí vamos con otra crisis.

Estructura y edición son definitivamente los verdaderos villanos de la película. Jared Leto se quejó de esto y con razón, pues el villano más villano de todos ni siquiera podría ser calificado debido a las pocas escenas en las que lo podremos disfrutar. Tanto se preparó para el personaje el actor, para ser desperdiciado de esa forma, y con pasajes indefendibles y poca muestra de su “locura”, que nos fue prometida en los avances.

Por lejos sobresale Margot Robbie, y en un plano similar, Will Smith. Ambos son los protagonistas absolutos de una producción que debería haber sido coral, y ahí la falla garrafal. Los chicos malos transforman un filme que necesitaba ser diferente, mostrar algo que no se haya visto, en una epopeya común y corriente, charla motivadora de por medio, y muestran más humanidad que algunos otros considerados del lado del bien. ¿Es eso bueno acaso? Para nada, la propuesta del comic, en el filme queda completamente edulcorada y si bien recordaremos algunos personajes, DC vuelve a verse en un pantano del que no pudo salir desde la polémica “Batman v Superman”.