Dallas Buyers Club: El club de los desahuciados

Crítica de Manu Blauab - Alta Peli

club de los desahuciados o Dallas Buyers Club, es la película dirigida por Jean-Marc Vallée, (un canadiense o de Quebec, cómo se diga el gentilicio), con Matthew McConaughey, Jared Leto, Jennifer Garner y Steve Zahn. Basada en la historia real de Ron Woodroof, (McConaughey), un vaquero de rodeo, drogadicto y xenófobo a quien a mediados de los ochenta le diagnosticaron VIH y con suerte unos treinta días de vida nada más. Hasta ese momento la única droga disponible para poder luchar con el virus era la famosa AZT, única aprobada en Estados Unidos. La misma le generó una descompensación que lo llevó al borde de la muerte.

Ahí empieza la cosa con Woodroof buscando medicinas compensatorias para importar a Dallas. Junto a la doctora Saks y Rayon, (el transexual que interpreta Jared Leto), fundan el Dallas Buyers Club, el cual empieza a crecer en cantidad y sedes por todo el país, (sí, todos estamos pensando en lo mismo pero ya conocemos las dos primeras reglas). Cuando la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos los descubren es donde comienza una guerra atroz por bajarlos.

El momento de Matt

El lobo de Wall Street, True Detective y ahora Dallas Buyers Club le tienen que hacer cambiar la opinión a cualquiera que haya visto sólo las comedias romanticonas y melosas de McConaughey como Cómo perder a un hombre en diez días o EDtv.

Pero acá Dallas, puede descansar tranquilamente sobre sus hombros como bien dijeron en RT (sin pasar por alto la actuación de Leto). Si bien el principio es predecible, del clásico tipo en que se encuentra un extremista en una situación límite que lo obliga a
derribar sus prejuicios e intolerancia entendiendo que la vida es más importante, es como está llevado adelante por un actor que se mete en el rol de esos que uno los recuerda perfectamente. No se trata de la misma persona que encontrás sobre la alfombra roja, (como Heath Ledger con el Guasón o Charlize Theron en Monster), sumado a una historia muy potente, lo vuelve memorable. Claro que estamos hablando de esas películas armadas desde el vamos para meterse con todo en los Oscars, y más allá de lo que uno pueda criticarles en sus intenciones, si el resultado es una película como esta no tengo mucho que objetar, (más allá de que después nos olvidamos quién ganó la estatuilla, excepto Santi Balestra, el sí recuerda).

Dallas-Buyers-Club-Poster-Header

Esa historia que te llega por cualquier lado

En la época en que aparece el VIH y el SIDA, en Estados Unidos se lo veía como una amenaza para los sectores marginados, pobres que se drogaban con jeringas y homosexuales, la fiebre rosa le decían sectorizándola aún más. Hay una mimetización entre Woodroof y el gobierno y por ende gran parte de la sociedad en aquel momento. Quiero decir, Woodroof se ve reflejado en la sociedad y su gobierno al no dar atención apropiada a las personas que contraían el síndrome. Pero la ruptura con ello, la toma de consciencia generalizada, se da cuando le pasa a uno de los que estaba en el otro lado. Woodroof pasó entonces de ser un fanático del rodeo a un activista muy importante y líder de un movimiento que lo enfrentó con el propio gobierno de los Estados Unidos.

Conclusión

La película está bien nominada a los Oscar y si el premio a mejor actor va para Di Caprio o don McConaughey nos tenemos que ir contentos igual, (de la sala del living a menos que tengan un cuarto ahí en California para prestarnos). La película trata un tema duro con una gran sensibilidad, al punto que ver a Jared Leto trasvestido como aparece no causa estupor alguno sino que permite acercarse a los personajes y tener empatía con ellos.

Básicamente, no les van a robar la entrada si pagan por Dallas Buyers Club, me parece.