El amor de Robert

Crítica de Jorge Carnevale - Revista Noticias

Todavía quedan películas hechas al servicio de grandes actores. Martin Landau tuvo su debut en 1959, en “Intriga internacional”, a las órdenes de Alfred Hitchcock, y desde entonces no ha dado una sola nota en falso. Woody Allen le dio la oportunidad de alzarse con un merecido Oscar por “Crímenes y pecados”, y ahora, ya anciano, vuelve a sorprendernos con la posibilidad de reencontrar el amor cuando llega el invierno. Robert Malone está en edad de quedarse tranquilo en la paz del hogar, pero sigue trabajando en una tienda y una tarde helada, cuando vuelve a casa, se topa con una vecina y siente que le mueven la estantería. Ella tampoco es una criatura y los dos arrastran experiencias de todo tipo, pero el amor no tiene edad y una química inmediata los junta y amenaza con cambiarles el libreto. Emociona con los recursos más nobles. Ellen Burstyn, espléndida.