Domingo de ramos

Crítica de Rodrigo Chavero - El Espectador Avezado

Entré a la sala con muchísima expectativa. "Domingo de ramos" ostenta un elenco con lo mejor del cine nacional. El Puma Goity, Gigí Ruá, Mauricio Dayub, Pompeyo Audivert: una selección, realmente. Tengo un gran respeto por esta gente y la verdad es que salí del Gaumont con una extraña sensación, a pesar de que me gustó mucho en su momento "Cien años de perdón" (y en menor medida "Solos"), este trabajo de José Glusman no me terminó de cerrar...
"Domingo de ramos" es un thriller oscuro, pueblerino y estructurado con flashbacks que gira sobre la muerte de una mujer madura, objeto de deseo de varios hombres de su medio. La dama es Doña Rosa (Gigí Ruá), quien vive sola en una mansión enorme alejada del pueblo de referencia. Está casada con Don Jaime (Héctor Bidonde) un hombre maduro y rico que está siempre de viaje y ella tiene que pasar sus días sola... Bueno, no tanto.
La película arranca con su muerte y nos instalamos en la escena del crimen. El comisario del lugar (el Puma Goity) llega para analizar la situación junto a un grupo de agentes y un forense y ahi la narración comienza a jugar con la temporalidad. El guión presenta hechos sobre la víctima que giran en un lapso de cinco días, ya que ella muere, justamente un domingo de ramos (y su cuerpo es descubierto días más tarde). Rosa ha sido una mujer mirada, deseada y centro de atención de mucha gente en ese lugar, por lo cual la trama mostrará una serie de eventos que el espectador deberá conectar para encontrar solución al misterio de su muerte.
Los rubros técnicos están cuidados aunque la banda de sonido me pareció un poco esquemática y en particular al inicio de la historia, repetitiva. Actoralmente, el trabajo en equipo de los intérpretes es sólido, todos ofrecen su experiencia y salen bien parados de la apuesta. El problema mayor de "Domingo de ramos", sin embargo, pasa por otro lado. La simpleza de los hechos que narra y la poca fortuna de la resolución del conflicto.
Si bien esto puede ser discutible (no deja de ser una impresión) , lo cierto es que la historia se presenta demasiado lenta y a pesar de que se nota el esfuerzo de crear suspenso con una variada gama de recursos (la fotografía, los tiempos, el sonido ambiental, algunos giros), lo cierto es que para ser un thriller, le falta fuerza. Hay atmósfera e intérpretes, pero no amalgaman de manera que el relato cobre vuelo y todo su potencial se transforme en acto.
Los escenarios son bastante escasos para mostrar la realidad pueblerina (uno de los tópicos del film) y muchas puntas (el tema del dinero, por ejemplo), no son explotadas como se podrían. La elección de personajes y sus apariciones es discutible (hay mucho estatismo en algunos, innecesario) y en lugar de sumar al relato, a veces lo retrasan, haciendo que la película tenga una extensión que se termina sintiendo en el cuerpo.
"Domingo de ramos" es recomendable solamente si seguis la trayectoria de alguno de los actores que presenta esta producción. Glusman sigue con el crédito abierto aunque no haya acertado esta vez, posee enormes condiciones para confiar en él.