Después de Sarmiento

Crítica de Brenda Caletti - CineramaPlus+

OBSERVACIÓN DE CAMPO

“Acá lo que se juega no es la promoción del año, sino que le encuentren un sentido a seguir viniendo a la escuela”. Dicha afirmación se convierte en el marco y el límite de la lente de la cámara puesto que ésta explora, busca, sondea y pone de manifiesto diversas cuestiones que engloban ese presupuesto pero siempre desde un ángulo más “objetivo” puesto que su lógica opera bajo la idea de exhibición y puesta en circulación del material en lugar de un análisis. La reflexión, por el contrario, se desarrolla de forma individual en cada espectador.

De esta forma, el primer largometraje de Francisco Márquez no sólo se propone como una suerte de cámara exploratoria que observa, se detiene, rastrea y continúa su estudio para la recopilación de más material; además, podría pensarse como el trabajo de campo de una investigación pues los fragmentos recolectados funcionan, en cierta medida, como las muestras que habilitan la elaboración posterior del trabajo propiamente dicho.

Dentro de esta concepción interactúa también el título de la película ya que Después de Sarmiento puede pensarse tanto como una suerte de proyección del futuro de los jóvenes una vez finalizada la escuela secundaria como también las nuevas técnicas o herramientas de enseñanza para suplir las deficiencias actuales.

De hecho, en el filme hay una fuerte impronta docente, institucional y estudiantil para mejorar el acercamiento de los alumnos a la escuela. Esto se percibe, en mayor medida, tanto en las discusiones de los alumnos del turno mañana y tarde para tratar de formar un centro de estudiantes común como también en las propuestas de varios colegios que se reúnen para conversar sobre los planes de enseñanza. El mismo efecto también se produce por la introducción de algunos egresados de múltiples edades que comentan sus experiencias en el Colegio Domingo Faustino Sarmiento.

Por tal motivo, el documental funciona como un primer acercamiento al campo, entendido como la tarea de concebir ciertas hipótesis, buscar las variables, indagar para obtener la información y recolectar los diferentes materiales. Después de Sarmiento se detiene en ese punto, en el cual sólo resta unir los fragmentos dispuestos sobre la mesa para demostrar o no la eficacia de las hipótesis antes formuladas. Allí entra en juego el rol del espectador, quien debe, de manera singular, armar su propio proyecto.

Por Brenda Caletti
redaccion@cineramaplus.com.ar