Desconocido

Crítica de Alexander Brielga - Cine & Medios

Búsqueda frenética

El catalán Colet-Serra parece tener predilección por las historias que van en una dirección y luego, drásticamente, cambian de rumbo. Lo hizo bastante bien en "La Huérfana" y ahora lo hace mejor en "Desconocido", aunque la temática de la pérdida de identidad en medio de una intriga es algo harto visto.
El Dr. Martin Harris (Liam Neeson) llega a Berlín con su esposa, pero antes de ingresar al hotel se percata de que olvidó su maletín, con el pasaporte adentro, en el aeropuerto. Sin avisar a su mujer, que está haciendo el check in en el hotel, Harris toma un taxi para regresar por el maletín. En el camino sufre un accidente de tránsito que le provoca un traumatismo que lo deja cuatro días en coma en un hospital. Al despertar va en busca de su esposa pero ésta no lo reconoce. Más aún, ella está con otro hombre también llamado Martin Harris.
La crisis de identidad no tarda en aparecer, y el Dr. harris comienza a dudar, empieza a considerar la locura, pero la memoria no le falla del todo y trata de atar cabos.
Desde el comienzo el clima es inquietante, Neeson impone su oficio y en cada gesto transmite las tribulaciones de su personaje, pero el director no consigue ir más allá. La sombra de Hitchcok se impone y hace que se espere más de esta propuesta. 
En el elenco se destacan dos figuras de lujo: el alemán Bruno Ganz ("La Caída") y Frank Langella, quienes comparten una escena clave dentro del filme, mientras el resto cumple correctamente.
El cambio de registro hacia el final de la historia es algo brusco, repentino, y toda ilusión de originalidad para resolver la trama se pierde por completo, por lo que "Desconocido" no alcanza a ser lo que insinuaba en su primera mitad, pero cumple como un correcto filme de suspenso y acción.