Declaración de vida

Crítica de Juan Carlos Fontana - La Prensa

La triste enfermedad del hijo

La cineasta y actriz francesa Valérie Donzelli y su marido Jérémie Elkaim, escribieron el guión de este filme de ficción, basándose en la propia experiencia personal vivida con su hijo Adam, el que a los dieciocho meses le fue diagnósticado un tumor cerebral maligno.

Como una manera de hacer su propia catarsis sobre un drama ya superado, porque felizmente el niño se logró recuperar, Valérie Donzelli cuenta paso a paso lo sucedido, desde que ella y su marido se conocieron en una discoteca, se enamoraron y tuvieron su primer hijo.

Ambientada entre Marsella y París, la película escapa a los cánones del drama clásico, e incluso transforma ese dolor que viven los padres, ante la rápida evolución de la enfermedad del niño, en un historia tan vital, como de un ritmo incesante, que contagia de optimismo al espectador.

ESCENAS BREVES
Mediante un bien aprovechado entramado de escenas breves, Valérie, que en el filme asume el papel de Juliette, la madre del niño y Jérémie Elkaim, el de Roméo, el padre, al comienzo viven los típicos inconvenientes de los primeros llantos del niño, que no los deja dormir. Pero poco después todo se agudiza y la visita a una médica, que le pide unos estudios del niño, a los padres, dan como resultado una operación que tiene una duración de nueve horas.

Lo que viene después es la incertidumbre ante las posibles nuevas ramificaciones del tumor, en el cerebro del bebé. Por suerte eso no termina sucediendo y la familia vuelve a recuperar la posibilidad de estar juntos.

"Declaración de vida" es una película chispeante, exquisitamente contada a través de un ritmo ágil, en el que su realizadora supo extractar lo absurdo y lo humorístico de lo cotidiano, que a veces encierra nuestra vida, aún en los momentos más difíciles.

Valérie Donzelli y Jérémie Elkaim, que también se ocuparon del guión de la película, consiguen cautivar al público son su sola presencia en la pantalla.