De amor y otras adicciones

Crítica de Martín Morales - MM Críticas

VIAGRA PARA TODOS

Esta es una de esas películas que es casi imposible tratar de definir con una palabra o con una expresión, simplemente porque tiene de todo y mezcla muchos estilos. Este es uno de los errores de la cinta, que si bien cumple su principal cometido que es el de entretener, (antes que nada la película es una comedia), se queda a mitad de camino en cada una de las expresiones reflexivas y cursis que intenta tocar.

Jamie es un hombre que trabaja vendiendo drogas en los hospitales, tiene un ego muy grande y es un ganador con cada una de las mujeres que se le aparece en el camino. Un día conoce a Maggie, una muchacha que tiene un problema de salud y que está algo paranoica, ya que piensa que ningún hombre quiere formalizar con ella por su enfermedad. Ellos se enamoran y van a tener que lidiar con sus inflados egos.

La cinta claramente se puede dividir en diferentes acciones o situaciones que van mezclando diferentes estilos narrativos y dramáticos. Principalmente, esta película es una comedia romántica, de desencuentros, de vueltas y de previsibles consecuencias. Por este lado, la cinta logrará satisfacer a los espectadores que vayan en busca de esto, ya que el romanticismo es el típico que se puede apreciar en cualquier cinta del género y se logra crear una correcta química entre los personajes principales.

Ahora bien, pese a que la cinta no logra destacarse, pero si entretiene, por el lado de la comedia romántica, ésta entra en diferentes terrenos que comienzan a empeorar o a poner a prueba el extremista y poco profundo guión. Todos los temas que se tocan carecen de profundidad y fundamentalmente de reflexión, quedan en la historia como un elemento más para hacer humor o para agregarle una dosis un poco dramática y melosa a la historia. La enfermedad de Maggie, el Parkinson, está muy bien interpretada por Anne Hathaway, pero en ningún momento, salvo por esa charla que ella presencia en Chicago, se llama al pensamiento o la reflexión. El personaje piensa que no se puede vivir tranquilamente con ese problema y el libreto no explora ni va más allá de sus sentimientos, todo se resuelve en un acto de amor sin profundidad ni verosimilitud (el momento en el que Jamie le pregunta al esposo de una mujer con el mismo problema y él le responde de manera inesperada, solo aporta dramatismo, pero cero reflexión al relato). Por otro lado, hay un tratamiento exagerado e incorrecto sobre la medicina, sobre las maneras en las que se aceptan los diferentes medicamentos que se venden, que si bien aportan una cuota interesante de humor, carecen de sentido y de respeto, (se da a entender el viagra es lo mejor; un médico se inyecta testosterona para triunfar por las noches; un vagabundo logra salir de su estilo de vida gracias a unas pastillas que encuentra en la basura; y hay una exhaustiva intención por plantear en todo momento el comercio interno de las clínicas sin importar la salud de los pacientes).

Las actuaciones son muy buenas. Anne Hathaway está muy bien en su personaje. Ella demostró que puede encarar un rol dramático y a la vez cómico con mucha soltura ("El casamiento de Rachel", "Secretos en la Montaña" y "El Diablo Viste de Prada"). Aquí le aporta mucho realismo a Maggie, principalmente en las reacciones de su enfermedad, cómo la lleva adelante y en mostrar esa paranoia que tiene con todo hombre que se le acerca y le pide algo más que una noche de lujuria. Jake Gyllenhaal también está muy bien, en especial en mostrar el espíritu ganador de su personaje y los cambios que va teniendo de identidad mientras va madurando y enamorándose.

"Love and other Drugs" es una cinta que tiene una correcta historia típica de amor; con un humor entretenido por momentos e innecesarios por otros (erección en el auto, por ejemplo); que tiene personajes secundarios poco inspirados (el hermano metido, las mujeres que se entregan fácilmente); y que divierte si se va en busca de una comedia romántica sencilla y redonda. Pero que falla al plantear superficialmente y no darle importancia a la enfermedad de la protagonista y a desarrollar cuestiones morales algo ofensivas y poco profundas. Bien actuada, con una dirección y una banda sonora muy correcta, y que nunca logra pasar la barrera de seriedad que en todo momento intenta cruzar.

UNA ESCENA A DESTACAR: las andanzas de Jamie.