Damas en guerra

Crítica de Claudio Lo Iacona - Todo lo ve

Compromiso y enredos con bajas de guerra

Damas en Guerra está producida por los mismos de Ligeramente Embarazada y Virgen a los 40 y es el primer largometraje del director Paul Feig, realizador y actor que pudo verse en Malas Enseñanzas, como el padre del Carwash y tiene en su haber series como The Office o Nurse Jackie.

La historia gira en torno a Annie (interpretada por Kristen Wiig) una mujer que cada vez que parece que va a tocar fondo, se da cuenta que puede llegar más profundo.

Y mientras está con un hombre que le hace daño, un trabajo que no le gusta, compartiendo una casa con unos personajes al estilo Notting Hill, se debe encargar con unas amigas de la boda de su compañera de toda la vida, Lilian (Maya Rudolph).

Todo obviamente se complicará más cuando aparece una adinerada acompañante de Lilian que pondrá en juego la amistad de Annie.

Bridesmaids que sería su traducción “Las Damas de Honor” y que en algunos países se conocerá como “La boda de mi mejor amiga” tiene momentos ocurrentes y simpáticos. Si bien le juega en contra la extensa duración (125 minutos) resulta llevadera y cumple con el objetivo de entretener. Además de tener un final con cameos incluidos y minitape de Actividad Paranormal.

Sin demasiadas pretensiones, Damas en Guerras es mujeres luchando por conseguir lo que desean y, en el camino como en toda guerra, hay bajas.