Conan el Bárbaro

Crítica de Martina Hirsch - Otros Cines

Guerreros en problemas

Marcus Nispel ("especialista" en reciclajes como La masacre de Texas y Viernes 13) intenta -sin demasiada suerte- revivir la franquicia fílmica que consagrara a Arnold Schwazenegger y basada en una larga saga de historietas y libros cuyo creador original fue el texano Robert Howard (1906-1936). Luego de un preámbulo en el que vemos el nacimiento y adolescencia de Conan de la mano de su padre y líder del clan (el maestro Ron Perlman), éste es asesinado por los enemigos. Así, el héroe (interpretado por Jason Momoa, visto en Game of Thrones) deberá ocuparse de vengarse y hacer rodar unas cuantas cabezas. Porque de eso se trata este film solemne y elemental. De un baño de sangre a puro gore, mucho efecto visual CGI y efectito en 3D. Película brutal (bruta) y decididamente mediocre que, en la comparación, eleva a la dirigida por John Milius en 1982 a la categoría de obra maestra.