Conan el Bárbaro

Crítica de Hugo Zapata - Cines Argentinos

Junto con Solomon Kane, que pudimos ver el año pasado, este estreno es por lejos una de las adaptaciones más fieles que se hicieron en el cine sobre un personaje creado por el verdadero padre de la literatura fantástica, Robert E. Howard (ver historia de Conan).
El director Marcus Nispel brindó un film superior en varios aspectos a la producción de 1982, que dirigió John Millius, por la sencilla razón que trasladó con más fidelidad ese mundo maravilloso de fantasía que desarrolló ese tremendo artista que fue Howard.
Este es el verdadero Conan.
Cuando me senté en la butaca a ver este film, mi único deseo como fan del personaje era que retrataran al verdadero guerrero cimmerio que conozco de toda la vida de los libros y los cómics y la verdad que el director Nispel hizo un buen laburo en este aspecto.
Conan es una fantasía grotesca que representa en un punto el lado más salvaje y oscuro del ser humano.
Es la bestia desencadenada que desprecia la civilización y que pese a todo, en el fondo, tiene un noble corazón. Por eso el personaje logra despertar simpatía pese a su violencia y machismo exacerbado.
Desde la primera escena, con ese nacimiento bizarro que presenta la historia de este ícono de ficción, la película deja en claro que su director entiende esta fantasía loca de Howard y está dispuesto a divertirse con ella.
Como se muestra correctamente en los primeros minutos de esta producción, Conan nació en pleno campo de batalla cuando el pueblo cimmerio fue atacado por los invasores de Vanir, un hecho que terminaría marcando su destino al vincular su vida eternamente con la violencia.
El director Nispel hizo un trabajo brillante al recrear la Era Hiboria, con una impresionante labor en la ambientación y los vestuarios que estuvieron muy influenciados por las descripciones de los cuentos de Howard y los cómics.
A nivel visual la película, especialmente la fotografía, es espectacular y está totalmente inspirada en la última y excelente colección de historietas de la editorial Dark Horse y las memorables ilustraciones de Frank Frazetta.
Por otra parte, la acción es muy brutal y está en sintonía con la naturaleza del personaje. Conan es así.
Esta es una producción bastante violenta con alto contenido de gore que en más de una escena se evoca a esas historias sangrientas que solían publicarse en la revista “La espada salvaje de Conan”, destinada a lectores adultos.
El corte del director, que de cabeza va a tener esta película en dvd, seguramente expandirá este tema.
Nispel brinda muy buenos momentos en materia de acción. La pelea de Conan con el Kraken y el duelo final con el villano (gran trabajo de Stephen Lang) son escenas tremendas que se disfrutan en la pantalla grande y están muy bien elaboradas.
Con respecto al protagonista, Jason Momoa presenta una correcta interpretación de este personaje. Por fin un Conan que no habla como un retardado!
Su enfoque del personaje es muy distinto a lo que hizo Arnold Schwarzenegger.
El guerrero de Arnold era más callado y reflexivo debido a sus limitaciones expresivas. De hecho, al austriaco le quitaron muchísimas escenas de diálogo que escribió Oliver Stone en su momento porque su interpretación era desastrosa.
Momoa, que es un poco más expresivo, interpreta muy bien al Conan reo y sacado que conocemos de la literatura y que en un punto fue un reflejo de su propio creador, quien desde chico fue un inadaptado social.
De todas maneras creo que es una perdida de tiempo detenerse a comparar demasiado las dos películas porque son producciones totalmente distintas.
John Millius en su obra tomó elementos del universo de ficción creado por Howard y desarrolló su propia visión de Conan y la mitología nórdica.
Marcus Nispel, en cambio, se dedicó a recrear con más detalles la visión y el mundo que creó el autor de esta obra en el cine, algo que nunca se había hecho hasta la fecha. Por eso la película es mucho más fiel a los cuentos y los cómics. Las referencias en la trama a relatos clásicos como “La Torre del Elefante” son geniales y es uno de los varios guiños que hay hacia los fans del cimmerio.
La trama argumental es un típico relato de Conan, que tal vez podría haberse mejorado.
Creo que le faltó un poco más de trabajo al desarrollo de los villanos y al personaje de Tamara, quien pasa en pocos minutos de ser una doncella virginal a un guerrera experimentada.
Sin embargo, estos defectos tampoco son para cortarse las venas. Leí cosas peores del cimmerio.
Me cuesta mucho entender la psicología de los snobs que se ponen a analizar filmes como Conan como si fuera una obra de Milton.
La película es una invitación para disfrutar de ese mundo loco creado por el genio de Howard, donde los hombres son guerreros fuertes, las mujeres son todas bellezas espectaculares y la vida de los personajes está marcada por la aventura y la acción.
Literatura pulp trasladada a la pantalla grande.
Buscás reflexiones sobre la humanidad y la vida probá con una conferencia del Dalai Lama. Esto es Conan, el bárbaro y creo que brinda un gran entretenimiento.

El Dato Loco: Ron Perlman, quien está excelente en este film como el padre del protagonista, es la tercera vez que trabaja en un proyecto relacionado con este personaje.
Previamente interpretó al guerrero cimmerio en el video juego del 2007 y luego en la película animada Conan: Red Nails, cuya producción se encuentra suspendida.