Casa vampiro

Crítica de Martín Escribano - ArteZeta

QUERIDOS MONSTRUOS

El rebelde que tiene apenas 180 años, el medieval sanguinario, el dandy del siglo XVIII y el que lleva ocho milenos muerto. Ellos son los protagonistas de esta comedia documental en la que se nos muestra cómo es la convivencia entre cuatro hilarantes vampiros, sus salidas nocturnas para conseguir alimento o divertirse en una disco, la ridícula rivalidad con los hombres lobo y las celebraciones compartidas con zombies y brujas. Lavar los platos, apagar el despertador desde el ataúd, la llegada de las nuevas tecnologías, las prevenciones para no sufrir “accidentes de sol” y la odisea de vestirse sin poder mirarse al espejo son algunos de los inolvidables fragmentos que entrega la esta cinta neocelandesa ganadora del Premio del Público en el último Festival de Toronto.//?z