Broken City

Crítica de Flor Salto - Loco x el Cine

Un alcalde con bronceado artificial y cabello de dudosa procedencia no es buena señal.

La corrupción política es un factor que afecta prácticamente a todos los gobiernos y pueblos, y si encima le sumamos época de elecciones, las cosas se ponen aún más turbias. Sabemos que todos los candidatos manipulan a los posibles votantes con acciones que pocas veces van más allá de las semanas previas al sufragio.

Todo esto tiene mucho peso en la trama de Broken City (2013), el nuevo film de Allen Hughes, director de El Libro de los Secretos (The Book of Eli, 2010).

Billy Taggart (Mark Wahlberg) es un ex policía que, según entendemos en el comienzo de la película, debió dejar su puesto luego de que su corazón le ganara a su instinto profesional y saliera a hacer justicia por mano propia. En ese contexto, Billy mató a sangre fría a un joven acusado de violar a una chica. Todo esto sucedió en un barrio latino en las afueras de New York y a los ojos de la hermana de la víctima.

Taggart se transformó en un héroe, hecho que provocó el comienzo de una sólida pareja. Pasaron los años y los daños, y el ex policía deviene investigador por orden del alcalde Nicholas Hostetler (Russell Crowe), tipo falso si los hay. Sus trabajos detectivescos incluyen cámaras fotográficas y arduos seguimientos. Billy hace su trabajo y recibe su paga, pero la cosa se complica cuando Hostetler le hace un encargo que va más allá de su ‘juramento’ laboral; quiere que persiga a su esposa y descubra con quién lo está engañando. Billy cumplirá con su labor, pero desde el preciso instante en que el alcalde tiene en su poder esas acusadoras fotografías, las cosas se volverán confusas y podridas para el protagonista.

Broken City es un thriller con demasiadas vueltas de rosca pero que no aburre. El guión es bueno (sobretodo teniendo en cuenta que es uno de los primeros trabajos del guionista) y las actuaciones coherentes. Tiene un ritmo bastante activo, constituyendo una de las principales virtudes de la película. Completa el elenco Catherine Zeta-Jones, que parece haberse relajado últimamente en cuanto a protagónicos respecta.

Para que ya se entusiasmen y vayan pensando en verla como plan de domingo a la tarde, enseguida muere alguien importante, lo cual causa toda la paranoia, emoción, acción y sorpresas que rodean a la película. Russell Crowe construye un personaje interesante, que se manda un par de chistes irónicos que están buenos a la vez que le hace agua a los planes de vida de más de uno. Wahlberg en cambio está correcto, en un personaje que no se aleja demasiado de sus anteriores incursiones cinematográficas, salvo cuando tira un par de palabras en español…Y si bien el film padece de ciertas escenas que ya hemos visto en numerosas ocasiones en otras películas, tiene buenos momentos para ofrecer.

En resumen; no esperes ver una de Scorsese, esperá ver un dramático thriller repleto de engaños y vaivenes que no va a terminar bien casi para nadie y que te va a recalcar que cuando se trata de dirigentes políticos o autoridades similares, todos mienten para caer bien parados.

@CinemaFlor