Boca de fresa

Crítica de Fernando Alvarez - Todo lo ve

Reflotar el pasado

Una curiosa película nacional que mezcla road movie, comedia y melodrama, tratando de recuperar un cine popular perdido. En Boca de Fresa, el segundo largometraje de Jorge Zima (Noche en la terraza), los intérpretes llevan adelante el relato a pesar de los desniveles que presenta el film.

Rodrigo De la Serna (Crónica de una fuga) y Erica Rivas (Por tu culpa) son pareja en la vida real y en la ficción, y encabezan el reparto, secundados por un siempre correcto Roberto Carnaghi.

El film narra la odisea de Oscar (De la Serna) y su tío (Carnaghi), quienes son los dueños de una productora de música en decadencia y descubren que una banda noruega ha convertido en hit el remix de una canción compuesta hace treinta años por un artista que pertenecía a su compañía.

Con la idea de volver a un pasado exitoso, Oscar, y su novia (Rivas) viajan a las sierras de Córdoba a bordo de un auto descapotable para encontrar al artista en cuestión.

La trama tiene enredos, toques de thriller que se pierden rápidamente, y un aire burlón alimentado por personajes que parecen salidos de una película de los años setenta.

Igualmente, el resultado es entretenido, disparatado y seguramente fue el tono buscado por el realizador, que no excluye una mirada por recuperar y reflotar los días de gloria a ritmo del cuarteto.