Blue Valentine

Crítica de Hugo Zapata - Cines Argentinos

Blue Valentine es una película que los amantes de las historias depresivas seguramente coleccionarán en dvd junto con la filmografía completa de Alejandro Gonzáles Iñárritu. Esta producción cuyo título evoca un maravilloso y brillante disco de Tom Waits se dedica a examinar con mucho realismo el nacimiento y decadencia de un matrimonio. Una propuesta que tiene varios puntos en común con Sólo un sueño, el film de Sam Mendes con Leonardo Di Caprio y Kate Winslet, que también trabajaba los altos y bajos de la relación de una pareja joven en los años ´50. Blue Valentine es menos melodramática, aunque más directa y brutal a la hora de narrar los esfuerzos que hacen los protagonistas para sostener una relación bastante complicada que poco tiene que ver con las historias de amor que suele brindar el cine norteamericano.
La trama desarrolla a través de una narración no lineal varias etapas de la relación de los
protagonistas a lo largo del tiempo y muestra como sus sentimientos van cambiando a
medida que ellos transitan distintos momentos de su vida.
Se trata de un film triste y desgarrador por momentos que llega a tocar las emociones
del espectador por las tremendas actuaciones de los dos protagonistas.
La película sobresale principalmente por los trabajos de Michelle Williams y Ryan
Gosling, quienes brindaron sus mejores interpretaciones en el cine hasta la fecha.
Cuesta entender después de ver este film que Gosling haya quedado afuera en las
nominaciones al Oscar, cuando su labor en esta producción con el tiempo va a ser
mucho más recordada que la actuación de Jesse Eisenberg en Red social.
Una buena recomendación para quienes busquen un drama maduro y emocional que no
se va a borrar de la mente a los cinco minutos de haber salido del cine.