Blanca como la nieve

Crítica de Laura Pacheco Mora - CineFreaks

Reina de corazones.

La guionista y directora francesa Anne Fontaine se anima con esta singular adaptación del conocido cuento Blancanieves, manteniendo la trama y utilizando los mismos elementos, como el espejo, la inocente y bella muchacha, los siete enanitos y la bruja. Con una cuota de erotismo y humor refinado, al estilo francés.

Blanche comme neige (2019) es un film que explora y se aleja del cuento de hadas alemán de los hermanos Grimm, Blancanieves y los siete enanitos del 1812. La trama tiene lugar en la época contemporánea. Una joven, Claire (Lou de Laâge), trabaja en el negocio de su madrastra (la nueva esposa de su padre, fallecido), Maud (Isabelle Huppert), quien al descubrir que su amante se ha enamorado de la joven, quiere deshacerse de ella. Pero Claire encuentra refugio con hombres de una aldea y se despiertan sus deseos con plena libertad.

Anne Fontaine se destaca por una dirección atinada que acompaña su guion, en este caso una muy buena adaptación que respeta los tres actos narrativos. Las grandilocuentes locaciones, la música, los contrastes logrados para realzar la esencia de la protagonista y la antagonista, están muy bien hechos y aportan al encanto de la magia del cuento, al que todos estamos invitados al ingresar por un túnel, continuando por un camino sinuoso, mar y bosque encantado, representan la entrada a un lugar irreal, logrando confusión inclusive para Claire. Todo esto es seductor, quizás la parte del desarrollo del personaje de Claire, se torne algo extensa. Sin embargo, la excelente interpretación de la madrastra y su imponente presencia, aporta el dinamismo esperado para seguir la trama. El espejo aparece de manera directa al comienzo y luego representado en los claroscuros de ambos personajes, lo que está relacionado con un juego de la directora, trazando una cualidad en su sofisticado estilo. Las interpretaciones de ambas y del reparto son muy buenas, se destaca la de Huppert, aunque una vez más, no se aprovechó desde la trama dramática, todo su talento y carácter.

¿Para qué contar una nueva versión de Blancanieves? Es un relato rebelde, no apto para menores y quizás, cumpla con las fantasías de ciertas personas de corromper la pureza de una inocente, bella y joven mujer. Sin embargo, considero que funcionó en este film el enfrentarse a un espejo de manera permanente, algo que todos realizamos como acto reflejo, sin tomar conciencia de las preguntas inconscientes y, más aún, de las respuestas que salen desde nuestro interior para conocernos a nosotros mismos.