Black Widow

Crítica de Martín Goniondzki - Cinéfilo Serial

«Black Widow» hizo su primera aparición en el Universo Cinematográfico de Marvel en 2010 en la segunda aventura en solitario de «Iron Man». Allí inició su camino el ahora reconocido personaje interpretado por Scarlett Johansson de una forma bastante hipersexualizada que poco a poco fue corrigiendo el rumbo con el avance del #MeToo y el correr de los años. Así y todo, tuvieron que pasar 11 años para que Marvel decida estrenar su film en solitario, habiendo quedado en una especie de limbo creativo durante mucho tiempo y teniendo que ver como otros personajes que no estaban en los inicios de este MCU, tengan su película antes que ella.

Obviamente, «Wonder Woman» (2017) allanó el camino e hizo que más personajes superheroicos femeninos como «Captain Marvel» (2019) puedan tener su protagónico en la gran pantalla, pero aun así las aventuras de Natasha Romanoff seguían siendo postergadas. Tanto fueron pospuestas, que incluso el personaje murió en «Avengers: Endgame (2019)» y por eso este film se siente como tardío e incluso intrascendente.

Más allá de eso la película está aquí entre nosotros, y si bien podría llegar a pensarse que las características de la espía rusa daban justamente para tener un relato que coquetee con el thriller de espionaje (que solo es tocado en la trepidante introducción del film), en definitiva, termina siendo otro de los tantos relatos de ciencia ficción de fórmula a los que ya nos tiene acostumbrado Marvel hace tiempo.

El largometraje se enfoca en retratar dos períodos, la infancia de Natasha en EEUU y como termina convirtiéndose en una espía y asesina implacable para la Unión Soviética, al mismo tiempo en que vemos su aparente «marco familiar» compuesto por Alexei (David Harbour), Melina (Rachel Weisz), y su hermana Yelena Belova (Florence Pugh, en su representación adulta), para luego situarnos en la época post «Civil War» (2016) donde los Avengers estaban divididos. Es en ese preciso momento donde Natasha deberá volver a sus orígenes cuando una conspiración la lleve a reencontrarse con su familia, que no es otra cosa que un grupo de ex agentes de soviéticos ya separados y con situaciones personales bastante alejadas del resto. Natasha deberá lidiar con Dreykov (Ray Winston), el líder de la agrupación Red Room y con varias de esas relaciones familiares resquebrajadas que quedaron de su vida anterior a su etapa de Vengadora.

Probablemente uno de los principales problemas de la obra es que trabaja con el personaje más terrenal del MCU pero así y todo la acción se vuelca a la ciencia ficción, desperdiciando la posibilidad de poder hacer una digna película de espionaje (incluso en un momento Natasha se encuentra viendo Moonraker de James Bond, que nos deja con la sensación de que podría haber sido un film de Bond pero justo decidió parecerse específicamente a ese que es de los más inverosímiles).

Cate Shortland (directora de «Lore») parece tomar ciertos elementos de «The Americans» en el inicio de la película o incluso «Killing Eve» con esa dinámica de ir trasladándonos por diversos países y locaciones, para después brindarnos algunos pasajes de comedia que reflejan la relación del personaje de Scarlett Johansson con su familia improbable y disfuncional. No es que el film resulte ser malo o aburrido, de hecho cuenta con varias secuencias de acción bastante creativas e impresionantes como nos tiene acostumbrado Marvel pero también sucede que la trama es bastante genérica y de fórmula, e incluso la introducción de tantos personajes nuevos y desconocidos, entre los que se destaca Yelena, con una maravillosa interpretación de la talentosísima Florence Pugh («Midsommar», «Little Women»), hacen que se le quite peso nuevamente (tal como pasaba en algunas entregas de «Avengers») a Black Widow que en esta ocasión es el personaje principal (o al menos debería serlo). Otra vez Marvel parece poner el ojo en el futuro y en el traspaso del mando (un traspaso que también es generacional) que termina olvidándose del presente y de darle una despedida digna al personaje que también resulta algo tardía y vacía por las cuestiones que explicábamos al comienzo de esta reseña.

«Black Widow» es ser un capítulo que no termina de hacerle del todo justicia al personaje, por lo que representaba para el MCU y por su aventura tardía, pero que aun así se presenta como un film de acción vertiginoso que gustará a los fans de Marvel y de este tipo de relatos.