Bikes

Crítica de Juan Pablo Russo - EscribiendoCine

Bicicletas animadas

Con un corte educativo y un mensaje directo, Bikes (2019), dirigida por Manuel J. García, es una fábula ecológica que busca afianzar entre los espectadores principios como la protección del medio ambiente y la preservación de la naturaleza.

Bikes, que según su realizador es un homenaje a Cars (2006), transcurre en Spokesville, una ciudad armoniosa y tranquila, repleta de árboles de colores, donde brilla el sol, el aire es limpio y los edificios están construidos con elementos extraídos de un taller mecánico, alternados con otros de inspiración asiática y con carteles con rótulos en caracteres asimismo orientales. Allí viven felizmente las bicicletas, a los que se les ha agregado ojos y boca para humanizarlos y así conseguir captar la empatía del espectador.

El protagonista de esta aventura es una bicicleta de montaña y color verde llamada Speedy, que se dedica a repartir el correo entre sus vecinos. Pero un día regresa a casa el admirado campeón local Rock Bikeson, quien auspiciado por empresarios y banqueros sin escrúpulos, intentará convencer a sus paisanos de que con un motor incorporado a sus estructuras corporales sus vidas –y su velocidad– mejorarán, sin desvelar las consecuencias nefastas que ello traerá para el medio ambiente. Tras el caos provocado por ese avance técnico tan dudoso, el resuelto Speedy, apoyado por sus amigos Piñon, Gassy y Montana, se tendrá que enfrentar a Rock en una carrera actualizada de aquélla de cuadrigas de Ben Hur y, con su triunfo, lograr erradicar la ambición materialista –y contaminante– de su ciudad.

Una fábula de mensaje ecologista marcado, un tanto simple en su mecánica narrativa pero efectiva en sus objetivos, Bikes busca crear conciencia sobre la utilización de estos vehículos sin motor en lugar de los automóviles que contaminan ciudades como Pekín, Madrid o Buenos Aires y, de paso, transmite otros valores como la amistad, el deporte, el trabajo en equipo y la honradez.