Bañeros 4: Los rompeolas

Crítica de Rodrigo Chavero - El Espectador Avezado

Nos acercamos a las vacaciones de invierno y el cine familiar nacional comienza lentamente a preparar su lineup para captar la atención del público. Dentro de ese espectro, hablamos de una cinta que retoma una saga que creimos cerrada en su tercera entrega, dado que pasaron unos cuantos años desde la últina.
A pesar de haber llevado más de 1 millón de espectadores a sala (en 2006, "Bañeros, todopoderosos"), se notaba que la franquicia necesitaba un nuevo enfoque para prolongarse en el tiempo. Luego de que este año tuvieramos la reedición digital y en 3D de la primera, regresa la banda de la última entrega, conformada por Emilio Disi, Pachu Peña, Pablo Granados y Fredy Villarreal a sus andanzas marplatenses, como en los viejos tiempos.
Detrás de las cámaras encontramos otra vez, al talentoso Rodolfo Ledo, hombre que sabe mucho de televisión (ha hecho programas como "Socorro quinto año" que promediaba más de 30 puntos en su mejor época) . Si bien muchos discuten su capacidad, lo cierto es que hizo suficientes éxitos para demostrar que conoce de propuestas ATP.
En esta oportunidad, trabaja sobre un guión de dos Salvadores: Valverde Calvo y Freire, (el primero es una leyenda con 47 desde la recordada "Quiero llenarme de tí", con Sandro en 1969!!!) y lo primero que hay que decir es que no han modificado la columna vertebral que tuviera tanto éxito (lo cual, anticipamos, no es positivo). Respetaron la estructura de las anteriores para posicionar "Bañeros 4", en esa línea. Digamos entonces que los fans saben que tipo de propuesta encontrarán. Nada nuevo bajo el sol.
No hay que buscar en esta saga un libro atractivo, actuaciones convincentes ni humor inteligente. En cambio, se ofrecen gags físicos, cuerpos exuberantes (Luciana Salazar y Karina Jelinek)y mucho clima de fiesta. La historia es casi una anécdota. Nuevamente un balneario, un grupo de amigos que no sabe ni siquiera nadar (siendo "Bañeros") trabajando en él y esta vez, una amenaza de destrucción del lugar si no venden en combo, rápido y con descuentos, las instalaciones y un acuario lindero, propiedad del personaje que juega la imitadora del momento, Fátima Florez.
En el desarrollo de la trama aparecerán situaciones con explosiones (no muy bien logradas, debemos decir), diálogos grupales que arrancan alguna sonrisa aislada, varias secuencias en Aquarium con lobos y focas y el clásico ritmo narrativo que evoca productos con poco vuelo, similares a los de la década del 80'.
Punto a tener en cuenta: el elenco (excepto Iudica, muy popular en estos años) no tiene tanta exposición televisiva como antes (los comediantes, decimos) y quizás a esta franquicia le cueste más llevar público a las salas. Igual, al elenco no parece preocuparle. Se divirtieron rodando la cinta y eso se precibe al ver "Bañeros 4".
Es difícil recomendar este estreno familiar, ya que si nos ponemos serios, hay flaqueza argumental en la realización y una concreción simple y sin sorpresas que no logra poner esta entrega a la altura de (por lo menos) las dos primeras. Destacamos a Nazareno Móttola como el mejor en un cast desparejo y poco propenso a arriesgar en pos de hacer algo original y jugado.
Si viste las anteriores y te gustaron, probablemente hasta pases un buen momento. Pero para el resto de los espectadores que no haya sido así, debemos decir que no es una propuesta que patee el tablero u ofrezca diversión garantizada. Estos bañeros están lejos de su mejor forma...De todas maneras, la elección es tuya. Discreto retorno (y un poco menos también).