Avatar

Crítica de Javier Pez - CbaNoticias

A la hora de hablar de Avatar no hay que darle muchas vueltas. La película es puro show. Desde su concepción está pensada como un entretenimiento alevoso que aprovecha al máximo las nuevas tecnologías para recrear, casi por completo, el mundo de Pandora, tierra de los Na’Vi, lugar en donde se encuentra enterrado una especie de oro, muy caro y codiciado por los humanos, que irán con todo a la carga para obtenerlo y los “avatares” harán lo propio para defenderse.

El director, James Cameron, es un tipo que nació para filmar películas grosas. Con grandes títulos en la espalda como son la súper taquillera Titanic, Terminator 2 o Alien, el tipo tiene el crédito suficiente para hacer lo que quiere. Se demoró diez años en presentar este film alegando que la tecnología no había progresado lo suficiente para recrear el “mundo” de Pandora. Y no estaba vendiendo verdura, generó expectativa con la demora y no defraudó.

La trama me pareció mejor de lo que esperaba, generalmente en este tipo de propuestas sci-fi uno no se encuentra con un buen relato y se conforma con unos lindos efectos. En cambio, James Cameron escribo una buena historia que mezcla romance, aventura e intereses políticos que acompañan bien a la estrella del film que, sin duda, es la propuesta visual.

A la película, prácticamente no se le puede recriminar nada. Cumple al cien por ciento con su objetivo, que repito es deslumbrar visualmente. Es poco probable aburrirse con este film, puede que a alguien no le guste la historia pero dentro de todo se hace llevadera, y eso que dura casi tres horas.

Hay que tener en cuenta que esta película es para verla en el cine, y si es en una sala es 3D mejor aún. Nunca falta el tipo que se compra un DVD trucho, filmado por un celular y después de verla en el living de su casa dice que no le gusta. Es obvio que no le va a gustar, lo bueno de esta película está en ver los mínimos detalles de los rasgos de los “avatares”, la perfección y el cuidad de cada centímetro del paisaje de Pandora. Ahí está el potencial de Avatar.

En síntesis, sin contar con grandes estrellas, ni con una historia distinta pero si con una buena billetera, Avatar va a marcar la corta historia del cine. Es muy probable que con el tiempo salgan otras que la sobrepasen, tanto en contenido como a nivel visual (esperemos que sea así, por el bien del entretenimiento), pero esta tiene el plus de ser pionera, la primer película que visualmente patea el tablero y muestra algo totalmente nuevo.