Ausencia

Crítica de Emiliano Basile - EscribiendoCine

Los seres del túnel

Para contrarrestar a las millonarias producciones de terror no hay nada mejor que las buenas ideas. Tal es el caso de Ausencia (Absentia, 2011), una producción independiente del género que construye el miedo desde una propuesta tan sólida como creativa.

La historia nos trae a Tricia (Courtney Bell) quien busca sin resignarse a su marido (Morgan Peter Brown) tras siete años desaparecido en circunstancias desconocidas. Cuando su hermana Callie (Katie Parker) la visita, Tricia está convencida de rehacer su vida y olvidar a su esposo. Sin embargo extrañas e inexplicables apariciones se hacen frecuentes en la casa, provenientes de un túnel cercano al vecindario.

Si no hay dinero para efectos especiales, ni para actores de renombre, sólo queda la imaginación para construir una buena y atractiva historia. Algo que entendieron bien los responsables de Ausencia, una pequeña y novedosa película que logra asustar mediante la magnifica utilización de sus recursos.

El relato mezcla un drama familiar con historias de fantasmas y seres de otro mundo (para no adelantar más). Y lo hace con tácticas expresivas explotadas en todas sus posibilidades. El sonido y las sombras sugieren el miedo que no puede mostrarse (un legado de Val Lewton, productor de los años cuarenta creador del terror sugerido), pero también el trabajo sobre el espacio es fundamental. Tanto la casa como el barrio se tornan lugares de encierro. Basta sumar un montaje preciso para acertar en cuanta sugestión se quiera generar.

La sensación de acecho inminente es tal, que se manifiesta la existencia del peor de los destinos. Desde la preocupación de Tricia sobre el paradero de su marido, se insinúa un desenlace nefasto. Un componente de sugestión muy bien manejado por el director, editor y escritor Mike Flanagan, que aplica las vueltas de tuerca suficientes para dejar atrapado al espectador en el destino de sus personajes.

Ausencia comenzó como un proyecto muy pequeño (en cuanto a producción y expectativas) y fue adquiriendo reconocimiento gracias a la crítica y el público que lo aclamó en los diversos festivales en los que circuló. Hoy en día es considerada una gran obra de culto dentro del género. Y vaya si lo es.