Atrapada

Crítica de Martín Morales - MM Críticas

EL DECEPCIONANTE REGRESO DE UN MAESTRO

Luego de 9 años sin realizar películas (su último estreno fue en el 2001 y se tituló "Fantasmas de Marte"), pero dirigiendo algunos capítulos de "Masters of Horror", John Carpenter vuelve al cine con una historia que aporta muy poco al género, que está repleta de lugares comunes y sobreactuación, pero que tiene, en ciertos momentos, el toque personal del director que entretendrá a los seguidores del género, pero que desilusionará a los fanáticos del maestro.
La policía encuentra a Kristen, una muchacha perturbada, incendiando una casa. Ella va a ir directamente a rehabilitación a un Instituto psiquiátrico, donde, al igual que sus compañeras, va a comenzar a ser perseguida por un fantasma del pasado. Ella va a intentar escapar del establecimiento y buscar la verdad que se esconde en el lugar.
Claramente aquí la historia se puede dividir en dos partes bien diferenciadas. La primera media hora es muy buena, introduce muy bien a los personajes y al conflicto y se mantiene un suspenso muy claro y escalofriante con respecto al misterio sobre lo que está sucediendo en ese lugar y con la figura villana que va apareciendo lentamente. Es aquí donde Carpenter utiliza los recursos más simples y satisfactorios para crear terror, como por ejemplo: la banda sonora (excelente en la creación de climas); los reflejos en los vidrios; manos y sombras que aparecen sin previo aviso; y correctos movimientos de cámara que crean atmósferas inquietantes muy bien logradas. Es por eso que, siendo la primera parte del relato la más sencilla en ideas y en planteos visuales, "The Ward" logra destacarse e introducir a la perfección el problema argumental.
Ahora bien, en el segundo tramo de la película es donde comienzan a aparecen los inconvenientes y las situaciones que, una vez finalizada la proyección, poca coherencia tienen con el resto del relato:
Partiendo por el principal error de la cinta, el guión, que comienza presentando con mucho interés las personalidades de las mujeres, y que termina siendo un ejemplo más de las ganas de convertir todo lo que sucede en el típico argumento hollywoodense, invocando giros narrativos que están de más y que ya se han visto numerosas veces en otras cintas del género. La historia es poco original, se ubica sin importancia en la década de los 60 (cosa que está remarcada varias veces durante el transcurso de la narración), está regularmente escrita (las conclusiones de los personajes) y se dejan demasiadas cosas sin explicación que, cuando el espectador comienza a revisar lo sucedido con anterioridad, no se entienden ni se intentaron justificar. El final es repetido y dejará pensando al público que ha seguido la carrera del director, ya que no va con su estilo ni con su manera de hacer cine. Se extraña aquí la simplicidad de "Halloween" o la intriga y el deslumbre de "The Thing". En cambio, predominan los excesivos giros y un complicado y lleno de clichés guión.
Por otro lado, la personalidad del fantasma que invade el Hospital tiene un desarrollo que no logra profundizarse y que, una vez expuesto el final, no se entiende. No hay una continuidad en lo que va haciendo, no se explica cómo hace para atrapar a las mujeres y en muchas ocasiones solo aparece para asustar al espectador, sin darle mayor importancia a lo que está sucediendo en escena. Cada una de estas cuestiones son totalmente irrelevantes para la historia, en especial una vez que se sabe quién es verdaderamente esa entidad, pero de igual manera van perjudicando el disfrute de dichos momentos, ya que no se desarrolló claramente su personalidad ni su manera de matar.
Las actuaciones tampoco ayudan a que la historia se sienta creíble. Amber Heard es sin duda alguna quien mejor está en el elenco, su personaje es el más importante de la película y está interpretado de manera muy correcta. Las compañeras de Kristen (Mamie Gummer, Danielle Panabaker, Laura-Leigh y Lyndsy Fonseca) están muy sobreactuadas, en especial en las escenas en las que están en peligro. Los doctores tienen una personalidad villana que desentona con la intención de la película y nunca logran destacarse, son los casos de Jared Harris, D.R. Anderson y Susanna Burney.
"The Ward" es un desilusionante regreso de una de las personalidades más significativas del terror. Una película con un guión regular, actuaciones que no logran destacarse y un villano que no posee continuidad. Con giros narrativos que carecen de ideas y una explicación final que ya se ha visto muchas veces, de igual manera, en otras tantas películas. Esperemos que éste no sea el broche de cierre de la carrera de John Carpenter, director de obras que quedarán en la historia del género, y que pueda volver a la simplicidad y a la imaginación que caracterizó a sus mejores películas.

UNA ESCENA A DESTACAR: los primeros 30 minutos.