Astro Boy

Crítica de Goldstein - Demasiado Cine!

“Astro Boy”, un robot de la vieja escuela

Sin dudas, a medida que pasaban los minutos para este estreno, se nos venia a la mente, sonante y andante el titulo “Teenage Mutant Ninja Turtles” y lo mucho que nos decepciono como entrega animada. Pero, creo yo que como fana a ultranza de estos expertos renacentistas de las artes marciales, les dimos una oportunidad. También rebotaba en nuestras cabezas la posibilidad de ver un viejo anime transformado en hibrido, algo que no sabíamos si era para niños, para adultos, para ambos o solo para entendidos. Esto, como muchas otras veces, tiene que ver con las expectativas, Astroboy no hizo tanto Marketing en nuestro país, pero hubo una sub-raza de adoradores que salieron a las calles: los veteranos padres.

Si, una fuerza motriz para esta película fueron los padres y adultos que gozaron la gloria de este anime tan querido en sus épocas doradas (Puedo asegurarlo porque encueste a unos cuantos). Pero para los “jóvenes”, que quizás conocíamos la trama y personajes, pero que realmente no teníamos la experiencia medular de verlo por las tardes, solo podíamos compararlo con experiencias contemporáneas, por eso teníamos miedo, pero no habíamos perdido la fe.

¿Megaman? No pibe, ¡AstroBoy!

Un niño incomprendido y a la vez fuera de serie, interesado y motivado por cosas ajenas a su edad, con ojos llenos de tristeza. Un padre obsesionado con la rutina de la vida moderna y la manutención de un ritma de vida humana bastante cancerigeno para nuestro futuro. Gobernantes déspotas e inútiles y una humanidad devastada y quebrada en dos. Aunque usted no lo crea, como decía Ripley, este es el planteo del universo que vemos en el largometraje, duro, real y no tan para niños que era algo que realmente no esperábamos.
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Apoyen a sus hijos, ¡¿Me escucharon bien?!

Esa fue sin dudas la primera sorpresa, la segunda es ver un Astroboy respetando parangones visuales y quizás reaccionarios de lo que es un anime moderno oriental. Es decir, se despega quizás un poco del comportamiento antiguo del anime, para dar paso a una evolución y reinterpretación del mismo, lo que le da un espectro mayor en cuanto a la posibilidad de comprension del espectador. La actualidad en cuanto al trasfondo, como puede ser la temática de contaminación y racismo global, a la contaminación y tratos familiares, es maravillosa y pasmódica. La película funciona como una patada de la línea de ataque de los All’Blacks directo al pecho. Es un golpe tan fuerte que no lo podemos controlar ni manejar, y ese golpe es el que da pie a la historia, el que nos permite ser por momentos el Doctor Elefun, y sentir esa esperanza cuando lo ve a Astroboy, y ese sentido de paternalidad ajena que por momentos el verdadero “padre” no siente. Lo que hace tan fuerte el personaje de Astroboy además, es el hecho de nunca demostrar violencia, sino de reaccionar con tristeza, con miradas, palabras y acciones medidas según la circunstancia, lo que nos habla de un personaje adulto, más que de un niño robot.

¡Que bonita Vecindad!

Miserias por doquier rodean a Astroboy, tanto en la familia, en los gobernantes de su ciudad, y sus antepasados terrenales. Fieles representantes animados de lo que pasa hoy en día en nuestro querido globo terráqueo. La crítica es tan fuerte y dura que es imposible no largar una carcajada cómplice de vez en cuando. ¿Ejemplos?…
Primeramente el rumbo incierto que le dio un gobernante altamente inestable y déspota (Porque no totalitario también), nos hace recordar y rever la postura política corrupta que hoy abunda en todo el globo, como los deseos personales se acaparan y contraatacan contra las meras necesidades. Es asombroso como en 3 o 4 escenas pueden sintetizar un mal que, seguramente, aqueja a muchas naciones.

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EL "Pacificador"... Que ironía.

Pero sin dudas, el mensaje más fuerte de la entrega, es que, en un mundo caótico e incontrolable por los adultos, tanto en la “civilización” como en la “barbarie”, los niños son los portadores de la cordura y de la esperanza de un futuro más equitativo, más real y concreto. Por momentos, veía a “La tierra de Nunca Jamás” plasmada siglos a por venir.

Back to Action

El equilibrio abunda. Tanto la animación como la dirección son buenas. No se abusa del recurso de que Astroboy es un… Robot… sacando así a relucir piruetas, explosiones, destrucción masiva, etc. Es mas, hasta las escenas míticas que en otras manos durarían horas, acá duran lo justo, sin sobrevaluar el recurso y sin darle más importancia de la que tiene. Creando un mundo básico, sin muchos detalles, personajes no tan rebuscados y bastante estereotipados se nos presenta la historia. Esto es importante debido que, como en otros recientes casos (Avatar) nos permite concentrarnos en diferentes elementos, que terminan ganando protagonismo, como las relaciones familiares o la posibilidad de ponernos en la carne robótica de Astroboy por momentos.

Sin pestañear les puedo decir que Imagi puso mas empeño en tratar de transmitir una historia, no se quedo en el camino por un segundo en “Astroboy”, nos llega tanto la historia, como la animación que vienen puliendo película tras película. Junto con “Gatchaman”, “Astroboy” fue una de las ultimas producciones que tienen en proyecto, en cuanto a animación computada. ¿Por qué mencionamos esto? Porque nos es grato ver como una empresa que tiene una meta clara puede ir mejorando con los errores (“Teenage Mutant Ninja Tourtles” claramente fue uno, y en muchos aspectos), y puede aprender de ellos. Nos motiva pensar que no solo son motivados por presentarnos animes de antaño o cartoons, solo por atraer a la gente que era fanática, o solamente que la conocía pero vuelve a verlo por la nostalgia, sino que se preocuparon por ser respetuosos, de generar una muy buena adaptación de cada historia. Podemos decir que esto abre un camino más que tentador a la tan esperada “Gatchaman”. “Astro boy” sin dudas, es el preludio de una obra maestra.