Asesinos con estilo

Crítica de Emiliano Basile - EscribiendoCine

Ashton Kutcher garpa

El lindo de Ashton incursiona en el género de aventuras sin dejar la comedia romántica de lado con Asesinos con estilo (Killers, 2010), un híbrido tan flojo como sus anteriores películas. Eso sí, su discurso acerca de la política de seguridad de EE.UU. deja mucho que desear. ¿Pero a quién le importa?

El espía Spencer Aimes (Ashton Kutcher) conoce a Jen Kornfeldt (Katherine Heigl), con quien se casa sin mencionarle nunca su oficio. Sus padres, interpretados por Tom Selleck y Catherine O´Hara, están siempre con ellos. Un buen día el pasado de Spencer vuelve poniendo la vida de él y su mujer en peligro. En ese momento descubrirán que tiene un precio puesto sobre su cabeza y todos sus seres queridos intentarán matarlo.

Todo los galanes de Hollywood incursionaron en este híbrido en algún momento de sus carreras: Mel Gibson tuvo su Dos pájaros a tiro (Bird on awire, 1989), Brad Pitt su Sr. y Sra. Smith (Mr. & Mrs. Smith, 2005), Tom Cruise su Encuentro explosivo (Knight and Day, 2010), hasta Schwarzenegger tuvo una historia muy pero muy similar con Mentiras verdaderas (True Lies, 1994).

No confíes en nadie, esa es la propuesta de Asesinos con estilo, planteo peligroso si los hay. De hecho así se genera la intolerancia racial, el exterminio de cualquier ser humano, la fabricación de armas nucleares, y demás cuestiones que alegran al mundo. Todo estructurado como un film de James Bond en esta pavada del nuevo carilindo de Hollywood.

Su mejor amigo, sus vecinos, la mujer de la esquina, cualquiera puede querer matar a Ashton Kutcher (no los culpamos) aunque este discurso es peligroso, sobre todo el plano final del film –que no develaremos- hace alusión a que no se puede confiar ni en la propia familia, hecho que establece la inseguridad como modo de vida para cualquier norteamericano.

Igualmente hay algo de luz al final del túnel. La trama del fugitivo sigue funcionando y las vertiginosas persecuciones evitan que se noten problemas graves de guión y montaje. Esto hace un film levemente digerible hasta los títulos de crédito finales. Su breve duración (90 minutos) es otro de los pocos puntos a favor.

La pregunta es ¿Por qué Asesinos con estilo no se estrena directamente en Dvd? La respuesta es simple: Ashton Kutcher garpa.