Annabelle

Crítica de Mauro Jacobo - Cinélico

La muñeca que defraudó...

"Annabelle" es el esperado spin off de la exitosa película de James Wan, "El Conjuro". La muñeca que tuvo sus 15 minutos de fama durante el metraje del film de Wan, consiguió el suficiente interés para ser producida y dirigida individualmente. Los resultados de calidad, lamentablemente no fueron los mismos.
La dirección de "Annabelle" recayó sobre John R. Leonetti, director de fotografía habitual de las pelis de Wan con el que hizo algunos buenos laburos. Como director de largometrajes no tiene la misma chapa que como cinematógrafo. Algunos de sus trabajos anteriores son las fallidas "El Efecto Mariposa 2" y "Mortal Kombat: Annihilation", dos productos realmente para el olvido. Con esta nueva película no hace tanta agua como con aquellas, pero tampoco logra sacar adelante un promesa que se perfilaba como uno de los blockbusters del verano.
Para empezar, la muñeca tiene un protagonismo débil, trucho. En toda la promoción se la mostró como eje central de la trama y la verdad es que eso cambia cuando uno ve el film completo. Entiendo que la muñeca de por sí sola no es la villana, sino que tiene un espíritu maligno que la posee, pero acá directamente la relegaron a un pedazo de madera con vestido que aparece cuando el demonio hace de las suyas... La que llamaba la atención en "El Conjuro" era la muñeca, no el demonio que la poseía. Así mismo, el demonio que cobra protagonismo por encima de Annabelle, tampoco es lo suficientemente interesante como para hipnotizar al espectador. En el metraje no se explica casi nada sobre su origen y personalidad, simplemente se limitan a mostrarlo como una entidad del mal, de las cuales hemos visto hasta el hartazgo en la gran pantalla. Mucho mejor hubiera sido profundizar sobre quien era el espíritu maligno y crear una conexión más fuerte entre el personaje y el público.
Por último, los recursos para asustar utilizados por Leonetti no son de lo más creativos. Ruidos intensos que aparecen de la nada, voces en off susurrando, mobiliario que se abre y cierra solo... eso ya se ha visto. Los únicos momentos para resaltar son dos a mi criterio. Una es la secuencia en la que la protagonista intenta bajar en el ascensor reiteradas veces y no lo consigue, lo que realmente me generó una sensación de desesperación e impotencia; y la otra es cuando el matrimonio es ataco en su casa al principio del film.
En general, no es un buen producto. No es un desastre como otros exponentes del género como "Actividad Paranormal" o "El último exorcismo 2", pero claramente no logra transmitir ni el miedo ni la conexión que sí se logró con "El Conjuro".