Alguien más en quien confiar

Crítica de Noelia Giacometto - Cinéfilo Serial

La música es más fácil sentirla y reproducirla que explicarla o definirla, tiene mucho de misterio y magia. Presenta para nosotros un mundo del que no somos totalmente capaces de comprender, pero al que llegamos una y otra vez de forma natural. Esta es la historia de la primera banda de rock pesado del país, quienes sin difusión ni apoyo de ningún tipo crearon una mística marcando una época.

El Heavy Metal argentino surge en la década de los ’70, grupos como Pappo’s Blues, Pescado Rabioso, Plus, Vox Dei, algunos de los que trazaron la línea de un género, del cual hoy se conoce de otra manera, pero a El Reloj, con sus contrapuntos progresivos, los tonos tensionantes y riffs penetrantes, se los consideró como los revolucionarios de este tipo de música. Poseían una impronta innata de hacer cosas muy elaboradas al extremo, en la época en que vivían.

“Es difícil a veces definirse por una línea o por un tipo determinado de música y frente a esta dificultad nos hemos inclinado por abarcar desde la musical barroca hasta lo más pesado de este tiempo. Esto que nosotros llamamos EL RELOJ”.

“Alguien más en quien confiar” es un documental de Matías Rojo y Gabriel Patrono, que narra de forma cronológica el origen y formación de El Reloj, banda integrada por Willy Gardi, Tucata Suarez, Eduardo Frezza, Luis Valenti y Juan Espósito, situado en 1970 hasta la última del 2001.

Cuenta con material de archivo, testimonios de profesionales de la música, además de los que pertenecieron a la antigua banda. Plasma la identidad del grupo, unos innovadores y adelantados para su época. El boca a boca fue el aliado que acrecentó de a poco su popularidad, forjando la clave del éxito.

Absolutamente provenientes de una dimensión diferente, al margen de ser un momento donde el rock era mala palabra, El Reloj logró dejar una huella de gran importancia, inspirando a varias generaciones de músicos. Su pico de notoriedad llega con la primera actuación en el Teatro Astral y luego en el Luna Park, pero cuando parecía que pegaban el salto con su primera gira internacional algo cambió. Los altibajos y las fluctuaciones tomaron más preponderancia dictaminando el rumbo del grupo, que aún hoy prevalece en el sentimiento colectivo de la gente rockera del Oeste de Buenos Aires. El film se centra en lo que fue y en lo que pudo llegar a ser.

En síntesis, “Alguien más en quien confiar” es ese viaje constante que resalta el amor y la pasión por la música. A su vez, se centra en la perseverancia de la banda en el camino musical y la evolución de la misma a lo largo de los años. Una línea de tiempo estampada de forma correcta con detalles de una consecuencia lógica que deriva en este homenaje y reconocimiento más que merecido a una de las bandas pioneras del rock pesado nacional.