Alba

Crítica de Walter Pulero - Cinergia

Adentrarse en la adolescencia

Después de enfermar su madre, Alba (Macarena Arias), una niña de 11 años, se ve obligada a mudarse junto a su padre Igor (Pablo Aguirre), una persona sumamente hosca y que vive en condiciones precarias. Él resulta prácticamente un desconocido para la niña que se siente cada vez más en soledad y alejada de su casa. Su padre se esfuerza por adaptarse a la nueva vida junto a su canos a la protagonista sigue a Alba en una especie de coming of age, en su búsqueda de pertenecer de alguna forma a un lugar. Si al contraste de su nueva realidad y el hermético mundo del colegio al que asiste se le suman el primer beso, la primera menstruación, la timidez y los miedos, encontraremos en Alba un relato hecho de experiencias universales.
hija, mientras que ella tratará de atravesar su día a día escolar, junto a su tímidamente adolescencia que se acerca y todos los cambios que conlleva.

La película, que recorrió varios festivales y estuvo nominado a los premios Goya en 2017, representa con una fotografía apagada la solitaria personalidad de Alba y los silencios la plasman en cada escena que supo construir la directora y guionista Ana Cristina Barragán. En este film continúa explorando el universo de la preadolescencia femenina y entre planos cerrados y muy cer
Esta película es una historia cargada de duelos y de nuevos comienzos, donde el abandono en una etapa crucial como es la adolescencia seguramente llegue a marcar a Alba para toda su vida.