Adiós entusiasmo

Crítica de Mercedes Orden - Cinema Sonor

Una puerta con múltiples candados divide una casa en dos territorios. De un lado está una mujer que pide salir de la habitación donde fue encerrada, del otro, sus hijos le explican una y otra vez que no pueden liberarla.
Axel (Camilo Castiglione), el más chico de la familia, escucha a su madre de manera atenta, creyendo en sus palabras. Fiel a lo que Margarita le dice, el niño se instala largos ratos a interactuar con ella, madera por medio, oyendo los requerimientos, maldiciones y manipulaciones que su madre dispara sin pausa. Mientras tanto, Antonia (Mariel Fernández), Alejandra (Martina Juncadella) y Alicia (Laila Maltz) van y vienen, turnándose para hacerse cargo de la situación mientras buscan algún punto de fuga -sea la música, la ropa o los hombres- para poder olvidar por un rato lo que ocurre del otro lado de la puerta.