30 noches con mi ex

Crítica de Patricia Pritzker - Chapeau Argentina

Nos encontramos ante la primera experiencia de Adrián Suar como director, aquí también protagonista. Se trata de una historia en la que "El Turbo" (Adrián Suar) quien trabaja junto a su socio (Campi) en una Financiera, es llamado para ser el apoyo de "La Loba" (Pilar Gamboa), su ex-mujer, quien acusa cierta inestabilidad emocional. Frente a una internación de varios años y ante una mejoría aparece un plan: que de a poco vaya reinsertándose en la sociedad. Pero esrto nom puede suceder de jun día para el otro, entonces su Dra (Elvira Onetto) le pide a Turbo que la lleve a vivir sólo por 30 noches a vivir a su anterior casa junto a él y la hija de ambos. Serían capaces ustedes, de vivir una aventura por un mes como la que acabamos de relatar? Entendiendo que ello depende del estado psíquico de cada persona, lo cierto es que no deja de ser una situación difícil de afrontar. En ese lapso vivirán situaciones cotidianas y agradables, también emotivas, y algunas difíciles de sobrellevar. Las actuaciones de los protagonistas son muy buenas, resistiendo Pilar Gamboa el mayor peso de la historia y destacándose sobremanera durante toda la historia. Es impresionante la cantidad de matices que su personaje desarrolla en el transcurso de los días, sus altos y bajos, mezclados con sus ganas de mejorar y tener un buen vínculo con su hija, enternecen. Al resto del elenco, ya mencionado, se suman Jorge Suárez y Elisa Carricajo como los vecinos que deberán lidiar con los vaivenes de Loba. También actúa como comic-relief Pichu Straneo, su amigo enamorado. Todos ellos completan el reparto de una película que entretiene y aborda una temática difícil al tratar un tema como la salud mental, y que debe y es tomada con el respeto que la problemática merece.