2012

Crítica de Fernando Alvarez - Todo lo ve

El mundo se cae a pedazos...

El año en el que la Tierra llega a su fin según la civilización maya. Con este punto de partida, el director Roland Emmerich (especializado en catástrofes de todo tipo) construye un relato que fusiona la aventura y las advertencias sobre una Tierra cambiante.

En ese aspecto, parece que el público estuviese montado en una atracción de un parque de diversiones de Orlando junto a los protagonistas: un escritor separado (John Cusack), su ex esposa (Amanda Peet), un profeta loco (Woody Harrelson) y un geólogo (Chiwetel Ejiofor) que prevee el peligro que se avecina. En tanto, los mandatarios mundiales (Danny Gover como el Presidente de los Estados Unidos) tienen planes secretos para salvar a los sobrevivientes.
Si bien su excesiva duración (153 minutos) le juega en contra, 2012 entrega adrenalina en la mayoría de sus secuencias, recordando a títulos clásicos como Terremoto o La aventura del Poseidón (con una escena casi calcada) y Volcano. Todo está pensado al detalle en esta megaproducción que no escatima gastos y en la que los personajes siempre se salvan raspando.
Persecuciones, escapes , la Tierra que se devora todo en segundos y el agua que llega de todas partes, son los ingredientes para sorprender al espectador.

El marco escenográfico también aporta lo suyo y juega con la imágen del Cristo Redentor en Río de Janeiro, derrumbándose como si fuera papel, o de la Capilla Sixtina hecha pedazos.

El dato curioso: la película no fue pensada para exhibirse en el Imax. Hubiese sido una atracción más.