Volver a Boedo

Crítica de Susana Salerno - Impacto24

San Lorenzo de Almagro tiene 110 años y fue fundado en abril de 1908, creció en Boedo y hoy se ubica en el bajo Flores. Su principal actividad es el fútbol, además de otras disciplinas como: básquet, natación, atletismo, hockey, rugby vóley, etcétera.

En abril 1915 llegó el ascenso a Primera División y, al año siguiente, se inauguró el Gasómetro. Era un estadio para 75 mil personas (el estadio más grande en la Argentina), en 1979 lo clausuran porque tenía algunos tablones rotos, fueron sufriendo otras vicisitudes y en 1982 pierde un juicio. Ya dentro de la dictadura militar se lo habían pedido para la autopista, entre otras cosas, lo compra un banco y este lo vendió al supermercado.

En unos noventa minutos se cuenta lo que fue el Gasómetro y la lucha para recuperar ese predio. Viendo este documental se entiende la pasión, el amor al club, con un buen material de archivo, interesantes testimonios, donde está la palabra de: algún jugador, hinchas, de los fanáticos (algo que se siente y no se compra), el tango, la poesía, todo tiene que ver con las raíces y el arraigo, tal vez el hincha de San Lorenzo se va a sentir más emocionado (se les va a escapar más de un lagrimón) e identificado, contiene la nostalgia, el fervor, la locura del hincha y en eso están los colores de un equipo que despierta el amor a esa camiseta. Un documental que resulta atractivo y entretenido, un buen trabajo por guionista y director Criscolo quien en 1975 fue la mascota del club de sus amores.